Las autoridades colombianas abren una investigación contra Viva Air

La información recopilada por la Superintendencia de Transporte evidenció que más de 80 vuelos no fueron operados el martes

Bogotá.- La Superintendencia de Transporte de Colombia abrió una investigación administrativa y formuló cargos contra la aerolínea de bajo costo Viva Air por suspender súbitamente sus operaciones el lunes pasado afectando a los usuarios, informó este miércoles la entidad.

La medida se tomó mediante una resolución por «el presunto incumplimiento» de la ley «debido a la suspensión súbita de sus operaciones» el pasado 27 de febrero «afectando a los usuarios que ya contaban con reservas emitidas y confirmadas».

Adicionalmente, la entidad impuso una «medida administrativa» en la que le ordena a Viva «que desarrolle un plan de atención a usuarios con el propósito de enfrentar la situación presentada con esta decisión».

Además, le ordena la remisión periódica del Sistema de Peticiones, Quejas, Reclamos y Sugerencias (PQRS) que radiquen los usuarios, la emisión de un comunicado oficial en donde consten los canales de atención y, que «se implementen las medidas compensatorias y en materia de reembolsos a que haya lugar».

La superintendente de Transporte, Lucy Ospina Arias, dijo que la entidad ejerce sus funciones de inspección, vigilancia y control al transporte aéreo y busca proteger a 466.604 usuarios que tenían reservas confirmadas al 27 de febrero, fecha de la suspensión de las operaciones de Viva.

La entidad pudo verificar mediante la página web de la aerolínea, que se continuaban vendiendo tiquetes, y que para la misma fecha, ya se habían vendido 5.750 reservas.

Desglosó que la investigación administrativa se sustenta en el presunto perjuicio causado a los usuarios del transporte aéreo «al no poder movilizarse a sus destinos, habiendo ya adquirido sus tiquetes y realizado la confirmación de sus reservas».

Además, la aerolínea manifestó por medio de sus canales, que los usuarios no serían informados de manera individual sobre la decisión de suspensión de las operaciones, tampoco compensados ni se cumpliría con el contrato de transporte, argumentando una imposibilidad material de la aerolínea.

La información recopilada por la Superintendencia de Transporte evidenció que más de 80 vuelos no fueron operados el martes.

Por su lado, el ministro de Transporte, Guillermo Reyes, advirtió que de ser necesario podría intervenir el mercado aéreo a fin de garantizar que los actores del mercado de la aviación se comprometan a seguir operando en condiciones que beneficien a los usuarios.

«Se trata de las acciones necesarias que podrían llegar, incluso a la intervención del mercado, de ser necesario, para proteger a los usuarios y garantizar las condiciones de equilibrio y eficiencia del mercado de transporte aéreo», puntualizó Reyes.