SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Aunque las radiografías son necesarias para detectar cualquier enfermedad, realizarse este estudio de manera frecuente podría traer complicaciones que pueden poner nuestra salud en riesgo.
La radiografía, una prueba rápida e indolora que genera imágenes de las estructuras internas del cuerpo, en grandes dosis, puede causar daños graves a los tejidos y aumentar el riesgo de que una persona padezca hasta cáncer más adelante. Esto debido a la radiación.
Los tumores más frecuentes por el uso de radiaciones son las leucemias, el cáncer de pulmón, de tiroides y de mama.
En la práctica, quienes ordenan procedimientos radiológicos deberían sopesar cuidadosamente los beneficios y los riesgos que cada examen supone para los pacientes.
El uso indiscriminado y a menudo innecesario de radiografías con fines diagnósticos es muy frecuente. Este estudio solo se debe realizar si es requerido por un especialista.