REDACCIÓN.- Las pruebas nucleares atmosféricas llevadas a cabo por el Gobierno estadounidense en el emplazamiento de pruebas de Nevada entre 1951 y 1958 causaron una contaminación radiactiva que provocó, a su vez, la muerte de hasta 695.000 personas, opina la cientÃfica de la Universidad de Arizona Keith Meyers.
La conclusión se basa en el análisis de los patrones de mortalidad de los estadounidenses en aquel perÃodo.
Meyers descubrió que la leche producida en la zona contenÃa concentraciones de los isótopos del yodo radiactivo I-131. Según sus estimaciones, el consumo de la leche contaminada causó el fallecimiento de entre 395.000 y 695.000 personas entre los años 1951 y 1973.
La contaminación radiactiva no se limitó solo a las regiones cercanas al emplazamiento de pruebas de Nevada, ya que se registró también en distintas partes del paÃs. «Las mayores repercusiones en la salud aparecen en las zonas mucho más allá del alcance de previos estudios cientÃficos y médicos», escribe Meyers en su estudio.
La cientÃfica señala que en trabajos previos analizaron las secuelas de las pruebas en la salud de los residentes de Nevada, Arizona y Utah, pero el mayor impacto en el Ãndice de la mortalidad no se registró en la región que rodea el emplazamiento de pruebas sino en las zonas con niveles moderados de contaminación radiactiva del interior de EE.UU.
«El número acumulado de muertes atribuidas a estas pruebas es comparable a los bombardeos de Hiroshima y Nagasaki», concluye la investigadora.