REDACCIÓN.– El papá de Britney Spears, Jamie Spears, habría sufrido la amputación de una pierna en su actual estancia en el hospital. Fue a principios de octubre pasado cuando trascendió la noticia sobre que había sido hospitalizado de urgencia debido a una infección bacteriana que se habría extendido rápidamente.
De acuerdo con TMZ, los médicos que atienden al papá de Britney Spears no habrían tenido más remedio que amputarle la pierna para detener el avance de la infección, tras cinco operaciones que no tuvieron buenos resultados.
«No está bien. La infección de su pierna era masiva. Se sometió a cinco intervenciones para contenerla, sin éxito. Sus doctores decidieron que la única forma de proceder era con la amputación«, explica una fuente.
La salud de Jamie Spears ya era delicada desde el verano pasado, cuando ingresó voluntariamente en una clínica de rehabilitación en Luisiana, donde vive con su hija menor, Jamie Lynn Spears, para lidiar con su conocido problema de alcoholismo.
De acuerdo con fuentes cercanas, a sus contratiempos físicos se une desde hace años una notable merma en su estado anímico.
La causa: la guerra mediática y judicial que mantiene con su famosa hija, quien lo acusa de haber cometido abusos durante la tutela judicial que ejerció sobre la cantante durante más de una década.
«Ha tenido muchos achaques, y a eso hay que sumar el torrente de críticas que ha recibido por la forma en que dirigió la tutela… Y Jamie piensa que todo es terriblemente injusto», aseguró la fuente.
A lo largo de este año, Britney Spears ha protagonizado sorprendentes reconciliaciones con varios miembros de su familia más inmediata, pero no con su papá.
Tras criticarlos en las redes sociales por el papel que jugaron durante su tutela, la princesa del pop reveló a sus seguidores que había mantenido un encuentro muy conciliador con su mamá, Lynne.
Posteriormente, Britney visitó a su hermana Jamie Lynn, quien escribió un libro de memorias que enfureció a la cantante, para limar asperezas y recuperar la confianza perdida.
El pasado fin de semana, Britney y su familia se reencontraron durante una fiesta en la que la cantante celebró su cumpleaños 42.
En las pocas fotos que se filtraron del evento, se ve a su mamá Lynne y también la del hermano mayor de la intérprete, Bryan Spears, con el que la cantante mantuvo una sonada disputa hace sólo un año.
«Estar juntos y celebrar el cumpleaños fue un momento genial para la familia», señaló una fuente a la revista People sobre lo significativo de ese reencuentro.
Una semana antes, la cantante había sorprendido a sus propios fans al compartir una foto inédita en la que posaba junto a su hermano. Así, la diva quiso felicitarlo públicamente por su cumpleaños 46 y, de paso, confirmar el fin definitivo de los pleitos.
La relación de Bryan y Britney se enfrió notablemente durante su ya extinta relación laboral. Y sobre todo, cuando éste fue nombrado tutor legal de Britney junto con su padre Jamie.
La artista, que no invitó a su hermano a su boda del año pasado con su ya ex marido Sam Asghari, habló mal sobre él, ya que éste había dado una entrevista en la que cuestionaba la salud mental de Britney y lo oportuno de la revocación de la tutela legal.
