En estos días, los temas obligados han sido: huracanes, corrupción, delincuencia pero no he escuchado la opinión del Presidente del PLD, Leonel Fernández. Me dijeron que expresa sus inquietudes en un periódico matutino. Busqué su último artículo y descubrí que no se refiere a esos eventos, su preocupación es la vejez.
En una página escribió “Apología de la Vejez”. La leí. Para conceptualizar sobre el tema y como siempre, subió a las nubes, viajó por el mundo a través de la lectura, se detuvo en algunas naciones, localizó grandes hombres de la historia, filósofos, políticos, militares, de Roma y del mundo que expresaran su sentir.
Dentro de ellos, menciona a Lucio Cornelio Sila, Cicerón, Catón el Viejo, Tiberio, Constantino, etc.
Se concentró en dar pinceladas, hacer alusiones de ancianos con poder, su papel político, naciones que los prefieren en altas posiciones, los que las retienen a pesar de la edad. ¿Qué persigue? Parecería que prepara el terreno para cualquier evento, competencia, cambio.
Leonel, en ningún momento aterrizó en RD. En su exposición no mencionó figuras de este país, quienes con sus actitudes y acciones han dado cátedras sobre cómo vivir la vejez con decoro, proyectando lo mejor para las nuevas generaciones.
No era necesario que Leonel anduviera el mundo para buscar modelos dignos de imitarse. Tenemos ancianos, adultos mayores o como desee llamarse, en todos los estratos sociales, que merecen ser destacados, imitados. Con su estilo de vida, dicen cómo envejecer siendo útil y con dignidad aun en medio de las calamidades, pobreza, riqueza o poderes.
Vienen a mi memoria, taxistas, enfermeras, empresarios, políticos, etc.
Para citar casos, pudo referirse y analizar el comportamiento de dos personalidades muy conocidas en nuestro medio, de áreas diferentes: el ex Presidente Joaquín Balaguer y al versátil compositor y cantante, Joseíto Mateo. Su llegada a la vejez y como la han vivido, son dignas de admiración.
Balaguer a sus 90 años y ciego, aspiraba volver a la Presidencia de la República y Joseíto, el Rey del Merengue, actualmente, a sus 97 años, trabaja en una producción musical, una salsa, que le dedica a su novia de 46 años y que dice “tu llegaste a mi cuando me voy, tu eres luz de abril y yo tarde gris” Es realista pero ¡No se rinde! Y eso es estupendo.
Hay muchos dominicanos que no teorizan sobre la vejez ¡la viven! Como cualquier otra etapa. Solo piensan en estar activos, en sembrar y dejar frutos positivos.
Recuerdo mi abuelo con 109 años, lúcido, dando órdenes en la finca. Los que saben conceptualizar deberían inspirarse en ellos. No hay que leer tanto ni ir lejos a buscar filósofos y políticos, para ilustrar una apología sobre la vejez. En el país ¡llueven los ejemplos!
Leonel, tranquilo. No necesita crear la plataforma mental, puede aspirar.