Los gobiernos de facturas cercanas a la dictadura caen en aberraciones de todo tipo.
Ya no solamente en lo político, en lo social, lo económico y en lo artístico la intolerancia a la discrepancia se va tornando cada vez más difícil.
Al decir que no compartes, en cualquiera de estos planos, con medidas que coexisten en él, es prácticamente colocarse en una distancia frontal en cualquiera de ellos. Ya Grimaldi se atreve a afirmar que hay un plan para matar a Leonel. El hombre-embajador que mató a un puerco en las escaleras en donde vive, ha creado, la fabula de un crimen, buscando formulas para justificar, reprimir poblaciones inconformes. Una política típica fascista.
Nos ha tocado de una u otra forma encontrarnos en un caso similar. Es imposible para nosotros sentirse cómodos frente a un arte, artista o conjunto de personas que se entregan en los brazos de ideas que correspondan al gobernante de turno.
La valentía de un Franklin Domínguez, Iván García, Armando Almánzar y otros más cuando se presentaban en el teatro de Bellas Artes en los finales de los 50 ESPIGAS MADURAS, es algo que jamás podremos olvidar. Tuvimos la suerte de verla no solo una vez, si no más de una.
Cómo pretenden algunos acallar nuestras voces y censurar nuestros artículos en pleno 2012? El pueblo tiene derecho a saber. Y quién decide cuándo se informa?
No soy de esa clase de persona. SOY DISTINTO.
Hay gente que cree que puede poner un bozal en mi boca y un grillo en mis manos ‘’Mire hermano yo no soy así, no soy de ahí, yo vengo de otro mundo, de otra época’’, pero de este país cuando la dictadura de Trujillo, cuando los 12 años de Balaguer nos obligó a montar junto a otros 7 Días con el Pueblo, una lección al mundo de lo que el pueblo es capaz de hacer.
Es bien difícil que ya en el 2013 se intente amordazar y encarcelar ideas cuando ellas vuelan, salen, viven muy por encima y se cuelan entre ellos destruyendo las malsanas ideas que ellos intentan imponer.
Tienen que inventar otros caminos para poder acallarnos.