Ciudad de México.- El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró este miércoles que «no hay pruebas» sobre el supuesto fraude electoral en Venezuela, en el que ganó su tercer mandato Nicolás Maduro, y cuestionó a la Organización de Estados Americanos (OEA) por su «intervencionismo».
“Vamos a esperarnos. Yo creo que se tienen que presentar pruebas, las actas, y pienso que deben tener actas, aunque se hayan llevado a cabo de manera electrónica, creo que en el procedimiento hay actas, hay constancias para saber qué sucedió”, respondió el mandatario a pregunta de EFE durante su conferencia matutina.
El gobernante mexicano rechazó que lo que denuncia ahora la oposición venezolana sea similar a la acusación de fraude que él hizo durante las elecciones mexicanas de 2006, cuando perdió por una diferencia del 0,56 % de los votos ante el derechista Felipe Calderón (2000-2006).
«No tengo elementos, o sea, no hay pruebas en el caso de Venezuela. Nosotros sí teníamos muchas pruebas», aseveró López Obrador, que señaló que «ningún país extranjero» exigió «transparencia» y acusó a los corresponsales internacionales de entonces de estar «a favor del fraude».
El Consejo Nacional Electoral (CNE) venezolano divulgó su único boletín la noche del domingo, cuando le adjudicó la victoria a Maduro con un 51,2 % de los sufragios, frente al 44,2 % del opositor Edmundo González Urrutia, apoyado por la líder María Corina Machado, inhabilitada para concurrir a las elecciones.
«A Calderón le dije que, si no contaba los votos, iba a quedar la sensación de falsa y de que, cuando se hace un fraude, esta mancha no se borra ni con todo el agua de los océanos», explicó el presidente.
Añadió que, «como no tuvo legitimidad en las elecciones», el mandatario panista (2006-2012) «quiso legitimarse declarando la guerra al narcotráfico», una situación que «todavía está padeciendo» el país.
«Entonces, imagínense el daño de un fraude electoral, lo que ocasiona el querer imponer y no respetar la voluntad de los ciudadanos y ciudadanas», advirtió.
Sin embargo, López Obrador emplazó al CNE a «dar todos los resultados» y a hacer públicas las actas de votación y exhortó a la oposición a que, «si no está conforme» con el veredicto final, acuda a las instancias judiciales pertinentes.
«Pero no comenzar la confrontación y la violencia. Esto no», afirmó, contundente.
Asimismo, señaló que la canciller Alicia Bárcena no participará en la reunión convocada por la OEA porque no está de acuerdo con la actitud de la organización sobre los comicios venezolanos.
“¿Para qué vamos a una reunión así? Eso no es serio, no es responsable”, enfatizó, y reclamó el fin del «intervencionismo», causa del «estancamiento» de los problemas de Venezuela.
Incluso el Centro Carter, que participó como observador en las elecciones venezolanas, manifestó el martes que el proceso “no se adecuó” a los parámetros y estándares internacionales de integridad electoral, por lo que “no puede ser considerado como democrático”.
Así, el mandatario mexicano reiteró su posición de «estar pendientes» a cómo evolucione la situación en Venezuela y pidió «respeto» al CNE.