Miami.- Los equipos de recuperación, compuesto por miembros de la Marina de EE.UU. e ingenieros de la NASA, se ubican ya en las inmediaciones de la isla de Guadalupe, frente a las costas de Baja California (México) para esperar el arribo de la cápsula Orión de la misión no tripulada Artemis I, cuyo regreso está previsto para las 12.39 horas del este de EE.UU. (17.39 GMT) de este domingo, informó la Agencia EFE.
A bordo del buque anfibio de la Marina USS Portland, los miembros del equipo han realizado en las últimas horas operaciones y simulaciones de cara al éxito del remolque de la nave, que llegará a la atmósfera terrestre a una velocidad de 25.000 millas por hora (40.000 km/h).
Una vez que la Orión sea remolcada y puesta en cubierta, durante las dos horas siguientes los ingenieros de la NASA recopilarán información sobre cómo impactaron en la nave las altas temperaturas que experimentó durante el reingreso y si es que tuvo efectos en la temperatura de la cabina de la tripulación, ahora solo ocupada por maniquíes.
En su viaje de descenso la nave, protegida con un escudo térmico de cinco metros de ancho, estará sometida a unos 5 mil grados Fahrenheit (2 mil 800 grados celsius), equivalente a la mitad de la temperatura en la superficie del Sol, como ha advertido la agencia espacial estadounidense.
De acuerdo a los planes de la NASA, la nave será remolcada a una base naval en San Diego, California (EEUU), desde donde luego será trasladada al Centro Espacial Kennedy, en Florida, para las evaluaciones correspondientes.
El regreso de hoy es la última prueba importante que acometerá la misión Artemis I, la primera de un programa con el que la NASA planea enviar nuevamente astronautas a la Luna e incluso mandar misiones tripuladas a Marte.
Durante su descenso, una vez que la atmósfera reduzca la velocidad de la nave hasta unas 324 millas por hora (520 km/h) se iniciará el despliegue progresivo de un sistema de once paracaídas que le permitirán alcanzar la superficie del mar a poco menos de 20 millas por hora (32 km/h).
La misión ya logró un importante hito cuando a fines del pasado mes alcanzó una distancia de 434.522 kilómetros (270.000 millas) de la Tierra, la máxima lograda por una nave espacial diseñada para transportar humanos y superando el récord que logró en 1970 la misión Apolo 13.
Los planes de la NASA son enviar la Artemis II en 2024 y al año siguiente la Artemis III, en la que los astronautas, entre ellos una mujer y un hombre de color, tocarían el suelo del satélite por primera vez desde 1972, cuando lo hicieron los enviados a la Luna con la misión Apolo XVII.