Brasilia.– El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, dijo este lunes que fue un trabajo «hercúleo» recuperar al país tras el Gobierno de Jair Bolsonaro (2019-2022) y pidió a sus ministros que se esfuercen por «hacer mucho más», en un momento en el que registra la menor aprobación desde el inicio de su mandato.
«Vamos a tener que hacer mucho más porque Brasil estaba completamente abandonado», sentenció Lula, en su primera reunión ministerial del año, en la que participaron la mayoría de sus 38 ministros.
Lula destacó las diferentes medidas sociales impulsadas durante el año y tres meses que ya suma su gestión, como la ampliación del programa de subsidios a los pobres Bolsa Familia y la subida del salario mínimo.
Las declaraciones del presidente llegan diez días después de conocerse un sondeo que situó el porcentaje de aprobación del Gobierno de Lula en torno al 33 %, la peor cifra desde que asumió el poder.
En su discurso, Lula apuntó a la necesidad de llevar a cabo «recortes», en lo que describió como un esfuerzo «inmenso» para recuperar las cuentas del país, ya que, según declaró, «sin dinero los ministerios no funcionarán».
A pesar de ello, se mostró optimista al recordar el crecimiento económico del 2,9 % que el país experimentó durante el año pasado y afirmó que Brasil va a continuar creciendo en los próximos años de su mandato, convirtiéndose en un país donde «el pueblo vivirá mejor» y de manera más «digna».
«Mi compromiso es mejorar la calidad de vida y el empleo del pueblo brasileño», sostuvo el presidente brasileño, que insistió en que están haciendo realidad las promesas que les llevaron a la victoria en las pasadas elecciones.
En las últimas semanas, Lula ha pedido a sus ministros que redoblen los esfuerzos para sacar adelante sus promesas de campaña, en especial en lo que se refiere al combate al hambre.