REDACCIÓN.- Unas 200 personas salieron este lunes a las calles de la ciudad de San Cristóbal de Las Casas, en el estado mexicano de Chiapas (sureste), a manifestarse contra la creciente violencia que se vive en la región y que ha desplazado miles de personas de sus comunidades.
La marcha-peregrinación, que estuvo antecedida por una celebración religiosa, llamaba a la unidad y la paz entre los habitantes de la región y a ella se unieron un centenar de jóvenes y niños expresando su miedo ante la violencia, inseguridad e injusticias que se vive en la zona.
Organizaciones civiles, madres solteras víctimas de violencia e integrantes de la Diócesis de San Cristóbal de Las Casas, cumplieron un ayuno, oraron y salieron a las calles convocando a la paz y al respeto a la vida.
La movilización inició a las 19.30 horas desde la Iglesia de Guadalupe hasta la Plaza de la Paz, en el centro histórico de la ciudad, donde la violencia se ha incrementado en los últimos meses.
La caminata, de poco más de un kilómetro de distancia, se cumplió en total calma y sin incidentes.
«¡Queremos paz para México!», «¡Viva la vida!», «¡Queremos paz!», «¡Paz para San Cristóbal!» fueron algunas de las consignas que rompieron el silencio después de una torrencial lluvia que cayó en la ciudad.
Los manifestantes portaban banderas blancas con la imagen de una paloma, veladoras, flores y el estandarte de la Virgen de Guadalupe, además de una imagen del resplandor del santísimo que portó el sacerdote Marcelo, párroco de la iglesia de Guadalupe.
Durante el sermón el párroco invitó a los presentes a unir fuerzas, a trasmitir a sus familias amor y paz, y los exhortó a unirse al ejército por la paz, para romper con la impunidad y la violencia en la región.
Al hacer esa exigencia, el sacerdote levantó la bandera de México, el estandarte de la Virgen de Guadalupe y la bandera de la paz y dijo «como el padre (de la Patria, Miguel) Hidalgo yo los invito a unirse al ejército, pero en esta ocasión sin armas, hoy toca luchar con un diálogo de paz y hermandad», exclamó.
En los últimos meses, el estado mexicano de Chiapas, el de mayor pobreza en México, sufre una escalada de violencia en algunas comunidades indígenas, debido a la acción del crimen organizado, que atemoriza a los pueblos indígenas de la zona Altos de Chiapas.