SANTO DOMINGO, República Dominicana.- En un país donde los hospitales carecen de una ¨mariposita¨ para colocar un suero a un niño enfermo, los senadores y los diputados se gastan una millonada cada mes en bebidas finas y exquisiteces importadas para satisfacer sus exigentes paladares.
Marino Zapete nos habla de este tema en La Cosa Como es.