SANTO DOMINGO.- Al conmemorarse este martes el 63 aniversario de los asesinatos de Juan Tomás Díaz y Antonio de la Maza, la señora Maritza Helú observa el homenaje a los héroes nacionales que fueron acribillados en la avenida Bolívar esquina Julio Verne. La testigo narra a Noticias SIN cómo ocurrieron los hechos.
Helú presenció desde allí la forma en que los valientes hombres enfrentaron a los miembros del régimen trujillista que los perseguían. “Ellos murieron ahí, pero no como tontos y tranquilos, ellos lucharon, eso fue una batalla”.
Maritza Helú contó que junto a su madre acostumbraba a dormir en una cama pequeña en el balcón de su casa, y que por eso fue testigo la noche que ocurrió la muerte de Juan Tomás Díaz y Antonio de la Maza.
“Señora Helú ¿Cuántos años usted tiene?”, contestó “yo tengo 80 y pico de años, el pico no lo recuerdo”, siguió: «Esa noche había un carro Chevrolet verde y llegaron varias personas armadas, y ahí fue que comenzó el tiroteo».
“¿Doña Helú, pero usted tiene buena memoria que recuerda el color y año del vehículo?”, -“Mi mente está lúcida completamente, a pesar de que a veces las personas no lo creen y lo ponen en duda”.
Manifestó que esa noche vio unos hombres que venían corriendo desde la puerta del Conde y que además venían persiguiendo “ahí inició el tiroteo, cuando inició la balacera los hombres entraron debajo del carro del padre de Juan Luis Guerra, el señor Gilberto Guerra, quien acostumbraba a parquear un carrito rojo ahí abajo donde fueron asesinados”.
“Ahí fueron acribillados, y fue la primera vez que escuché la frase ¡Abajo Trujillo!”, contó.
Después de la balacera, vino la calma y se oían voces que decían “los civiles que bajen si no quieren que ametrallemos” porque ellos vieron una sombra que entró al edificio y pensaron que había alguien más, pero no, era una “mariposita noctámbula (una mujer), lo que pasa es que yo le digo así”, dijo Maritza Helú.
Narró que había que bajar con cédula en mano y cuando bajamos la escalera había dos hileras de militares “entraron a los apartamentos y robaron muchísimo, robaron de todo”.
Maritza Helú fue víctima de la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo, ya que su padre fue asesinado de una puñalada en el pecho, supuestamente a manos de esbirros del “El Jefe” como lo llamaban muchos en esa época.
Cuando ocurrió el asesinato de su padre, en ese entonces vivía en la provincia de Santiago, de donde es oriunda. Luego de la muerte de su progenitor Leónidas Trujillo, ayudó a su madre a mudarse a Santo Domingo al apartamento ubicado en la avenida Bolívar esquina Julio Verne, donde cayeron en un enfrentamiento Juan Tomás Díaz y Antonio de la Maza.
Cada año doña Maritza pone su bandera en el balcón para honrar su memoria y se asoma en un gesto de solidaridad y patriotismo.
Su increíble historia se conserva en los archivos del Museo Memorial de la Resistencia Dominicana.
Al conmemorarse el 63 aniversario de su muerte, la Comisión Permanente de Efemérides Patrias (CPEP), la Fundación Hermanos de la Maza y la Fundación Héroes del 30 de Mayo, organizaron un evento patrio en honor a los héroes Antonio de la Maza y Juan Tomás Díaz en la Plaza Patriótica ubicada en el lugar de los sangrientos acontecimientos, en la avenida Bolívar.
Acto del 63 aniversario de la muerte de Juan Tomás Díaz y Antonio de la Maza.
El acto inició a las 10:00 de la mañana, con la entonación del Himno Nacional, seguido del depósito de ofrendas florales. Esta conmemoración contó con la presencia de decenas de familiares de los héroes del 30 de mayo, miembros de las fundaciones patrióticas y personalidades de la vida nacional.
Juan Tomás Díaz y Antonio de la Maza, quienes son considerados Héroes del 30 de Mayo.