Redacción.- Marleny Rivera, una joven madre residente en San Cristóbal, se siente desesperada por no haber podido inscribirse en la universidad debido a problemas con sus documentos de identidad. “Mi sueño y anhelo es poder estudiar, pero como tengo dos actas de nacimiento no he podido hacerlo”, afirma Rivera, quien ha visto pasar los años sin lograr concretar su objetivo académico.
Según Rivera, la Junta Central Electoral ha puesto trabas para cancelar una de sus actas de nacimiento, lo que ha impedido que complete su inscripción universitaria. Pese a tocar muchas puertas en busca de solución, el proceso se ha convertido en una pesadilla por la falta de recursos para cumplir con los requisitos solicitados.
Rivera precisó que tiene desde el año 2005 luchando con el sistema. Aunque en ocasiones ha creído que estaba cerca de resolver la situación, siempre surgen nuevos requerimientos que, debido a la falta de recursos, no ha podido cumplir.