Las declaraciones se produjeron en medio de crecientes quejas por apagones y cuestionamientos sobre el manejo financiero del sistema eléctrico.
Santo Domingo.- El presidente del Consejo Unificado de las EDES, Celso Marranzini, rechazó este lunes que las pérdidas del sector eléctrico hayan aumentado en lo que va de año, afirmando que ocurre exactamente lo contrario, en respuesta a recientes revelaciones que apuntaban a un incremento respecto al mismo período de 2024.
Las declaraciones se produjeron en medio de crecientes quejas por apagones y cuestionamientos sobre el manejo financiero del sistema eléctrico. Según explicó, las pérdidas se están reduciendo y afirmó que no está dispuesto a utilizar mecanismos que distorsionen los datos para mostrar una falsa mejoría.
“Yo no vine aquí a engañar pérdidas”, subrayó el funcionario, tras señalar que en el pasado existían contratos heredados de administraciones anteriores que vendían el kilovatio a siete centavos, cuando el precio promedio de compra actual es de 15.5 centavos. “Nosotros salimos de todos esos usuarios no regulados para evitar que se manipulen las cifras”, añadió.
Expertos del área económica consideran necesario analizar el sistema eléctrico en su totalidad, desde la generación hasta la distribución, con el fin de transparentar el manejo de los recursos y asegurar que todos los clientes paguen por el servicio que reciben.
Advirtieron que uno de los problemas persistentes es que las EDES no siempre cobran lo que facturan, lo que impacta directamente las finanzas públicas y aumenta la necesidad de subsidios estatales. “Cuando aumentan los déficits en cualquiera de las áreas, como en la distribución, el Estado tiene que colocar más recursos para cubrirlos”, señalaron.
En ese sentido, plantearon la urgencia de realizar una auditoría forense del sistema eléctrico para corregir distorsiones y fortalecer la eficiencia del servicio.
El presidente del Consejo Unificado de las EDES aseguró que trabajan en medidas para mejorar la calidad del servicio energético, entre ellas, la instalación de nuevas subestaciones y la implementación de sistemas que garanticen el pago por parte de los usuarios.
Estas acciones buscan estabilizar el sistema, reducir las pérdidas reales y disminuir la dependencia del subsidio estatal, todo dentro de un enfoque orientado a la sostenibilidad financiera y operativa del sector eléctrico nacional.