Equipos de bomberos de la Defensa Civil, las Fuerzas Armadas, el Ministerio del Interior, la Cruz Roja y los bomberos continuaron este domingo las operaciones de rescate de personas atrapadas en comunidades anegadas por las lluvias y escurrimientos desde las montañas que desbordaron el río Cauto y varios de sus afluentes.
La Habana.– Más de 16.000 personas han sido rescatadas en zonas de la provincia Granma (este de Cuba), que quedaron aisladas por inundaciones tras la crecida del río Cauto, el más largo y caudaloso de la isla, luego del duro impacto del huracán Melissa, informó este domingo la televisión estatal.
Equipos de bomberos, la Defensa Civil, las Fuerzas Armadas, el Ministerio del Interior, la Cruz Roja y los rescatistas continuaron este domingo las operaciones de salvamento de personas atrapadas en comunidades anegadas por las lluvias y los escurrimientos desde las montañas, que desbordaron el río Cauto y varios de sus afluentes.
Entre los operativos de salvamento realizados durante los últimos cuatro días por las intensas inundaciones, se reportó la pasada madrugada la evacuación de cien residentes en la localidad Los Mangos, del municipio Río Cauto, uno de los puntos más críticos identificados por las autoridades, según el canal de televisión CNC TV Granma.
En toda la provincia de Granma, más de cien mil personas fueron evacuadas o protegidas en casas de vecinos y familiares por los efectos del huracán Melissa, de acuerdo con los datos ofrecidos por el canal local.
Las autoridades calificaron la situación como “muy complicada” y “difícil” debido al elevado nivel de las aguas, sobre todo en los municipios Río Cauto y Cauto Cristo, que aún permanecen en fase de alarma. En tanto, la Defensa Civil, máximo organismo de gestión de desastres, declaró al resto del oriente cubano en fase recuperativa.
Los organismos advirtieron que el momento de mayor peligro —la altura máxima de las aguas— puede ocurrir hasta 72 horas después de que deje de llover en la cabecera del río, aunque se ha observado una ligera disminución del nivel entre Cauto Cristo y la presa Mella.
Melissa tocó tierra en Cuba durante la madrugada del pasado miércoles en el sureste del país y salió siete horas más tarde por el noreste, acompañado de vientos de hasta 200 km/h y lluvias torrenciales que alcanzaron 400 milímetros en algunos puntos.
Además de Granma, el meteoro —uno de los más destructivos que han golpeado al país en los últimos años— afectó también a las provincias Santiago de Cuba, Holguín, Las Tunas y Guantánamo.
Hasta el momento, el Gobierno cubano no ha publicado una cuantificación de los daños ni ha reportado víctimas.