Santo Domingo.-La Dirección General de Persecución del Ministerio Público inició la investigación, luego de numerosas denuncias presentadas por ciudadanos, que afirman haber sido víctimas de una estafa perpetrada por una estructura piramidal que operaba en diversas zonas del territorio nacional.
Los presuntos responsables alegaban contar con la debida autorización para llevar a cabo actividades de intermediación financiera y participar en el mercado de valores, tanto a nivel nacional como internacional.
Cuando el esquema se hizo insostenible, colapsó y los estafadores desaparecieron, cediendo sus acciones en las empresas a terceros y cerrando las cuentas bancarias.
Indica la Solicitud de medida de coerción que la supuesta red se introducían en las iglesias cristianas, principalmente las evangélicas.
La estructura criminal, que operó en el período de tiempo comprendido desde finales del año 2020 hasta septiembre del año 2022, se encontraba liderada por el nombrado “Rafael Martínez Batista y su cónyuge Eridania García Veloz Martínez”, quienes tenían como socios en las actividades de reclutamiento y captación de víctimas más de 12 socios.
El modus operandi consistía en que Rafael Martínez Batista, o algunos de los reclutadores, convocaban a las víctimas a una sesión que llamaba “entrenamiento”, que tenía lugar, en muchos casos, en las oficinas de las empresas “Investor Winner IW SRL y Guro Investments SRL”, ubicada en la Av. 27 de Febrero o en las instalaciones de Higüey, provincia La Altagracia.
Para captar estas víctimas usaban inicialmente el sistema de referencias por los que llamaban “asesores”. También, “…crearon páginas web y perfiles de redes sociales”, con el objetivo captar víctimas sin importar el lugar donde se encontrarán, y dar apariencia de seriedad a las empresas utilizadas en el esquema de estafa.
Inmediatamente colapsó el esquema, eliminaron las páginas web y borraron el contenido de las redes sociales.
Dice el MP que Predicaban a través de las redes sociales que pretendían “estar fuera del radar” refiriéndose a sistema financiero regulado. Buscando con lo mismo captar cualquier tipo de dinero y también justificar los altos rendimientos que ofertaban.
Señala el documento que ya captados los interesados, se llevaba a cabo la reunión en donde se engañaban a las víctimas presentándoles gráficos y esquemas de supuestas inversiones en el mercado de valores internacional y de operaciones de trading, además de enseñarles testimonios falsos de personas que habían obtenido beneficios.
También les “…mostraban pagos de impuestos para generar confianza y establecían las actividades de captación de fondos que realizaban eran con los permisos correspondientes de la Superintendencia de Bancos y de la Superintendencia del Mercado de Valores”
Al momento de convencer a las víctimas para que realizaran la entrega del dinero, los reclutadores les hacían llenar un formulario que titulaban “Formulario de solicitud para ingreso a cuenta de inversión Persona Física”, en donde estos debían colocar los datos de “…sus ingresos, completar su perfil personal, establecer datos laborales, identificar a la persona que lo refiere, además de su asesor” de igual forma debían llenar una “Declaración de Justificación de Ingresos” donde se establezca el origen de los fondos de su “inversión
La supuesta red hacia promociones de entrega de órdenes de compras por valor de DOP$ 20,000.00 para las personas que se hicieran miembros o que aumentaran su capital. De igual forma, la estructura entregaba certificaciones a las personas, a los fines de que pudieran obtener préstamos o más fondos para aumentar su capital.
Otras técnicas utilizadas para mantener la confianza de las personas y seguir captando nuevas víctimas era con la “…celebración de actividades, fiestas y rifas”
El sistema se mantuvo rentable para la estructura a pesar de que estos iban sacando y gastando el dinero adquiriendo distintas propiedades, incluyendo La “…construcción de un costoso inmueble en Higuey, donde instalaron “The Investor Winner Academy”, con un costo aproximado de 60 millones de pesos”
En de noviembre de 2021, Rafael Martínez Batista y Eridania García Veloz de Martínez, adquirieron un inmueble ubicado en rl Municipio Padres las Casas, provincia Azua, por la cual pagaron la cantidad de RD$3,000,000.00.
El dinero que era depositado a las diferentes cuentas de las empresas, luego era transferido a cuentas personas de los miembros de la estructura criminal
Además de la adquisición de bienes y la utilización de los fondos en actividades personales, comenzaron a repartir beneficios irracionales entre los miembros del que llamaban “departamento operativo”, “…quienes debían encargarse de seguimiento a inversionistas, captación, respuestas por redes, entre otras funciones de tipo operativas”
En el esquema piramidal, cada vez que la estructura hacía los pagos a las víctimas enviaba a través de “WhatsApp o Telegram, o en algunos casos colgándolo en Facebook o Instagram, un anunció que establecía el pago del mes correspondiente”
En agosto del año 2022, a causa de la sustracción de los fondos y la baja en la captación de nuevas víctimas, comenzó a hacerse insostenible el pago de las supuestas comisiones, y volvieron a publicar los avisos con “…disculpas por los inconvenientes”
En el mes de septiembre de 2022 se volvió irremediable el déficit de fondos, por lo cual dejaron de pagar a todas las víctimas, lo que generó el reclamo masivo de estas por los canales de comunicación (WhatsApp) y con visitas a las oficinas. La estructura criminal procedió a establecer el cierre temporal de las actividades, justificados en el paso de la “Tormenta Tropical Fiona”
Además de la excusa del fenómeno atmosférico, a las personas que no querían aceptar el cambio en el tipo de pagos de interés se les decía que no se estaban realizando los pagos a los clientes porque tenían las cuentas congeladas y algunas canceladas por culpa de las autoridades del sistema financiero.
En el periodo de septiembre 2022 hasta marzo 2023, la estructura recogió el dinero que quedaba en las cuentas, siendo cerradas algunas de estas por las autoridades y otras simplemente vaciadas por los miembros de la red; ocultaron y vendieron bienes; se mudaron a lugares remotos del país, e incluso algunos fuera del país.
Hasta noviembre de 2021 la alegada red tenía un promedio mensual de DOP$ 30,000.00, aumentando a montos desde DOP$ 93,000,0000.00 millones mensuales, luego de iniciar con la captación de los montos de las víctimas
En las muestras de los movimientos bancarios se observan también transacciones a favor del imputado Julio Miguel Duverge García con conceptos de
“pagos de servicios”, “viaje a Dubai”, “compra de activos”, entre otros, lo que demuestra el uso del imputado del dinero captado a través de maniobras fraudulentas y falsas promesas realizadas a las víctimas.
El modus operandi empleado por esta red delictiva consistía en atraer a individuos con la promesa de rendimientos mensuales que oscilaban entre el 10% y el 30% de la inversión realizada. Se les aseguraba que estos beneficios se derivarían de operaciones de trading1 realizadas a través del bróker2 Pepperstone, supuestamente llevadas a cabo por los miembros de la estructura.