“Me quejo y Me quejo”

La barca donde viajo con sus discípulos era prestada, pues El no tenía como comprar una.

Un cordial saludo a todos mis queridos lectores.

Nosotros los seres humanos siempre nos estamos quejando por todo.

Si el mundo anda mal, es porque nosotros andamos mal. Nos quejamos que el gobierno solo hace política, pero es que nosotros no nos preparamos y lo que queremos es subir al poder para robar y obtener prebendas.

Decimos que la policía es inoperante, pero es que no cooperamos con ella. Tapamos a los ladrones en vez de delatarlos porque tenemos miedo.

No me conceden el crédito, pero es que no nos damos cuenta que somos mala paga y que estamos en la ista negra de los bancos.

Mi auto no funciona, pero no nos damos cuenta que nuestro auto tiene diez o doce años.

Que calor tan insoportable, pero no pagamos las electricidad y nos enganchamos. No nos damos cuenta que sin aire acondicionado o un ventilador no se puede vivir. Pero si tenemos para tomarnos una o más cenizas los fines de semana.

Mi esposa solamente se queja, bueno yo llevo 53 años de casado y mi esposa se queja igual, pero hay que comprenderlas y llevar el matrimonio. No solo soy yo. Somos dos los que nos casamos.

Como esta de sucia la ciudad, pero es que yo salgo de mi casa con mi bolsita de basura y la tiro donde hay basura, no coopero con mi ciudad.

Los amigos escasean, no es que los amigos escaseen. Sino que yo tengo que saber escoger a mis amigos, no cualquiera que tú conoces es tu amigo.

Mi jefe no me comprende, es que no estamos amarrados a un trabajo, nosotros somos libres de buscarnos otro trabajo y no culpar a los jefes de que no nos comprenden, recordemos que el caballo se amarra donde dice el jefe.

Los precios no paran de subir, pero si tenemos dinero para jugárnoslo en lotería o tomárnoslo en cerveza mientras en nuestra casa pasan hambre.

Si me tocara la lotera, pero es que me juego el dinero en vez de ahorrarlo. Y así nos vamos quejando toda la vida.

Pero es que no me recuerdo que el lugar dónde Jesús nació era prestado, no tenía donde recostar la cabeza.

El burrito que El monto, era prestado, pues no tenía como comprar uno.

Los panes y los peces que el multiplico eran dados por un joven, pues Él no tenía como comprarlos.

La barca donde viajo con sus discípulos era prestada, pues El no tenía como comprar una.

El sepulcro donde fue enterrado era un sepulcro prestado.

Solamente lo que el poseía era su CRUZ.

¿Todavía te quejas tú, que tienes más que El?