SANTO DOMINGO.- Las autoridades dominicanas persiguen a Erick Randhiel Mosquea Polanco y varios de sus familiares implicados en la Operación Falcón.
Según las investigaciones del Ministerio Público, Erick Randhiel Mosquea, llegó a convertirse en “un poderoso y temido narcotraficante internacional” que, juntos a sus ejes operativos dentro de la organización, movilizó miles de kilos de cocaína desde Colombia, a través de República Dominicana, hacia Puerto Rico, Estados Unidos y Europa.
El Ministerio Público aún no ha depositado ante la Suprema Corte de Justicia, la solicitud de la asignación de un Juez especial para investigar a varios legisladores, tal y como informara Yeni Berenice Reynoso.
Mientras el órgano acusador y la DNCD persiguen, con el apoyo de todos los órganos de seguridad del Estado, a Erick Randhiel Mosquea Polanco y a otros implicados en la red de narcotráfico y lavado de activos desarticulada con la Operación Falcón.
Además de Erick Randhiel Mosquea Polanco, conocido como Rodolfo Beltrán, El Sony 7, El Chiquito, El Hombre y/o Chite, se encuentran prófugos sus hermanos Harington José Mosquea Núñez y Claritza Andreina Mosquea Eduardo.
Las autoridades también persiguen a Alberto De Jesús Polanco (El Prieto y/o Many), socio y testaferro del narcotraficante.
Según la solicitud de medida de coerción a la red de lavado de activos se le ocuparon unos 130 vehículos, incluyendo tres blindados, así como una embarcación pequeña y una grande. También, alrededor de 4.9 millones de dólares en efectivo y más de 22.7 millones de pesos, decenas de inmuebles, siete estaciones de combustibles y varias fincas, incluyendo una de banano.
El pasado viernes los jueces de la suprema corte de justicia conocieron solicitud de extradición en contra del imputado del Caso Falcón Juan José De La Cruz Morales sindicado por las autoridades como el brazo operativo de la red de narcotráfico y lavado de activos.
El responsable de recibir supuestamente la droga en la zona este del país aceptó la extradición voluntaria a Estados Unidos para responder por los hechos que se le imputan.
Las autoridades que cuentan con la cooperación de la DEA, advirtieron que cualquier persona que Proteja a los prófugos puede tener consecuencias y ser procesados por complicidad