SANTO DOMINGO.- El fiscal Miguel Collado, representante del Ministerio Público en el caso Medusa, informó que este martes avanzaron hasta la página 718 en la lectura de la acusación, cuyo expediente tiene más de doce mil páginas.
En esta parte del proceso Collado detalló que plantearon líneas como el Plan de Humanización, en el cual se ejercieron tipos penales como desfalco y soborno, según el órgano acusador.
El fiscal de la Dirección General de Persecución del Ministerio Público agregó: “también vimos líneas que van desde el soborno de la empresa de Ricardo Pérez Mella, el cual incrimina directamente al acusado Jean Alain Rodríguez de haber recibido sobornos”, al tiempo de explicar que iniciaron la parte correspondiente al financiamiento ilícito de campaña, con el llamado “búnker”.
Sobre el “búnker criminal”, detalló que “era una especie de zona franca que tenía el acusado Jean Alain Rodríguez para dar una apariencia en redes sociales en los ataques personales que recibía, y así como la institución a raíz del caso de Odebrecht; este tenía una especie de zona franca, el cual respondía mensaje y otras actividades con relación a su figura”.
En el sexto día de la lectura del expediente contra los acusados de la Operación Medusa, el Ministerio Público detalló cómo se llevaron a cabo los actos delictivos a través del proceso de construcción y remodelación de los Centros de Corrección y Rehabilitación (CCR) a nivel nacional, durante la gestión del extitular del Ministerio Público, Jean Alain Rodríguez Sánchez.
El exprocurador Rodríguez Sánchez dirigió el Ministerio Público en el período 2016-2020.
En la operación Medusa, que tiene como principal acusado a Rodríguez Sánchez, el órgano acusador presentó una acusación de 12,274 páginas, acompañada de más de 3,500 pruebas, incluyendo más de 400 testigos.
La acusación fue presentada contra 41 personas físicas y 22 empresas.
La acusación, que se presenta en el Tercer Juzgado de la Instrucción del Distrito Nacional, presidido por el magistrado Amauri Martínez, fiscales adscritos a la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca) reiteraron que los acusados de la Operación Medusa enfrentan cargos criminales por coalición de funcionarios, prevaricación, asociación de malhechores y estafa contra el Estado. También, por sobornos, crímenes y delitos de alta tecnología y lavado de activos.
La lectura de la acusación en la audiencia preliminar se conoce en el Tercer Juzgado de la Instrucción del Distrito Nacional.
El magistrado Martínez aplazó la audiencia preliminar para el próximo viernes 7 de julio, a las 9:00 de la mañana.