TEGUCIGALPA.- Cuatro personas, todas miembros de una misma familia, murieron ahogadas luego de que el vehículo en que se conducían fue arrastrado el domingo por las aguas de una quebrada en el sector de Cañaveral, departamento de Cortés, en el norte de Honduras, informó este viernes un oficial de la Policía Nacional.
Las víctimas fueron identificadas como José Discua, su esposa, Elsa Suyapa Carodona, y sus hijas Estefany y Magaly Discua, agregó el informante.
Discua, un reconocido maestro de educación, viajaba en su vehículo con su familia, y al intentar cruzar de noche una quebrada, cuyo cauce había crecido por las lluvias que afectan en el norte y occidente de Honduras, fueron arrastrados, según fuentes de organismos de socorro que han participaron hoy en su búsqueda.
Los cuerpos de las cuatro personas fueron hallados en distintos sitios, en un tramo de un kilómetro, dijo a los periodistas uno de los socorristas del Cuerpo de Bomberos.
Las víctimas residían en Tapiquilar, municipio de Santa Cruz de Yojoa, Cortés, agregó.
El miércoles, las autoridades hondureñas confirmaron la muerte de un niño de tres años en el oeste del país por ahogamiento, luego de que su padre, que lo cargaba en brazos, fuera arrastrado por las agitadas aguas de una quebrada en el departamento de Copán.
La Secretaría de Gestión de Riesgos y Contingencias Nacionales (Copeco), de Honduras, solicitó el jueves a los habitantes de varios municipios del norte del país, una «evacuación preventiva» ante la crecida de ríos caudalosos que cruzan la zona, por lluvias de la temporada.
El llamado a la evacuación obedece a las constantes lluvias en el oeste del país, donde nacen los caudalosos ríos Ulúa y Chamelecón, que están subiendo de caudal inundando partes bajas de sus riberas, indicó la Copeco en un comunicado.
Las precipitaciones, que durante la semana han dejado incomunicadas temporalmente varias comunidades de los departamentos de Ocotepeque, Copán, Santa Bárbara y Lempira, en el oeste del país, por daños en carreteras primarias y secundarias, continuarán «debido a la convergencia de humedad y viento proveniente del océano Pacífico y el mar Caribe», añade la información oficial.