REDACCIÓN.- La artista Françoise Gilot, que fue pareja de Pablo Picasso durante una década, murió a los 101 años en un hospital de Manhattan. Gilot sufría de problemas pulmonares y cardiacos, explicó su hija Aurelia.
Autora de un libro titulado Vida con Picasso, publicado en 1964, Gilot fue no solo una de las pocas mujeres que abandonó por su voluntad al pintor español, sino que además rehizo su vida sentimental y artística y tuvo una notable carrera en Estados Unidos como pintora y escritora tras su separación.
Gilot conoció a Picasso en 1943, año de su primera exposición, cuando ella tenía 21 años y él 61 y ambos estaban emparejados. El encuentro fue en el París ocupado por los nazis, en el restaurante Le Catalan. Nunca se casaron pero mantuvieron una relación durante diez años y tuvieron dos hijos en común, Claude y Paloma.
En un momento en que se está reinterpretando la figura de Picasso como un hombre manipulador y machista, el rotativo recuerda un extracto del libro, cuando Gilot anunció al pintor que lo abandonaba y Picasso reaccionó así:
“¿Te crees que alguien va a interesarse en ti? Jamás lo harán solo por ti: hasta las personas que crees que te aprecian, solo será una especie de curiosidad por una persona cuya vida rozó la mía tan íntimamente”, le dijo.
“Nunca escuché a nadie decirle que no a Picasso. De hecho, a mí me llamaba ‘la mujer que dice no’, porque cuando tenía que decir no, lo decía”, afirmó una vez Gilot, que fue amiga, entre otros, de André Malraux o Henri Matisse.
El libro fue un superventas y pese a su tono mayormente amable con su examante -lo llegó a dedicar “a Pablo”-, enfureció a Picasso, que le retiró la palabra, así como a los dos hijos comunes. Tras Picasso, Gilot mantuvo una relación con el pintor Luc Simon.
Desde 1964 vivió entre Estados Unidos y Francia, y siguió exponiendo su trabajo. En 1970 se casó con Jonas Salk, el investigador médico estadounidense que desarrolló la primera vacuna segura contra la poliomielitis, etapa en la que vivió en California.