REDACCIÓN INTERNACIONAL.- El multimillonario estadounidense Elon Musk anunció que sus compañías SpaceX y X (antes Twitter) se trasladan de California a Texas. El empresario explicó que la «gota que derramó el vaso» fue un proyecto de ley firmado el lunes por el gobernador de California, Gavin Newsom, que prohíbe exigir al personal escolar que notifique a los padres los cambios de identidad de género de los alumnos.
«Debido a esta ley y a las muchas otras que la precedieron, atacando tanto a familias como a empresas, SpaceX trasladará ahora su sede central de Hawthorne (California) a Starbase [complejo industrial cerca de Brownsville, Texas]», escribió el magnate el martes en sus redes sociales. «Y la sede de X se trasladará a Austin», agregó.
«Hace un año dejé claro al gobernador Newsom que leyes de esta naturaleza obligarían a las familias y a las empresas a abandonar California para proteger a sus hijos», explicó Musk.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, dijo que la decisión de Musk «consolida» a su estado como «líder en exploración espacial«.
Los críticos han argumentado que el proyecto de ley es demasiado invasivo y menoscaba los derechos de los padres. Un grupo que se opuso a la medida, California Family Council, denunció que «es un ataque directo a la seguridad de los niños».
La polémica ley entrará en vigor en enero del próximo año. Entre tanto, el tema de transición de género en menores ha suscitado fuertes debates en todo EE.UU. Varios estados gobernados por republicanos han adoptado leyes para oponerse a los procedimientos quirúrgicos de cambio de sexo para este grupo etario, mientras que las jurisdicciones demócratas promulgaron leyes que declararan a sus territorios lugares «santuarios» para los que desean hacerlo, incluso sin el consentimiento de sus padres.
Rusia, por su parte, promulgó en 2022 una ley que prohíbe la propaganda LGBTIQ+*, de pedofilia y de cambio de sexo.