SANTO DOMINGO.- Unos 600 niños y niñas recibieron juguetes y regalos durante una actividad organizada por el Voluntariado Banreservas y en la que también se intercambió plásticos por alimentos.
Noelia García de Pereyra, presidenta del Voluntariado, y Samuel Pereyra, administrador general del Banreservas, compartieron su felicidad y desearon a los presentes un feliz y próspero 2024.
Ambos agradecieron al padre Manuel Ruiz por su colaboración para hacer posible que esta actividad se realice cada año. Además, destacaron el compromiso del voluntariado con el medio ambiente al intercambiar alimentos por plásticos procedentes del río Ozama.
Sabrina Andújar, directora del voluntariado, dio la bienvenida a la festividad y resaltó que en Navidad no existían límites para la diversión.
“Prepárense para vivir una mañana llena de risas, sonrisas y momentos inolvidables”, expresó Andújar.
El padre Manuel Ruiz expresó su gratitud al Voluntariado Banreservas por integrar a la familia del Río Ozama en sus proyectos, y subrayó la importancia del intercambio de plásticos por comida.
La amenización estuvo a cargo del Circo Caña con Reno y la animación de los personajes Galleta, Duende, Oso y un conjunto de bailarines, que añadieron un toque especial a la actividad.
El espacio contó con juegos inflables, comida, animación, y la participación musical de la escuela Movearte Río Ozama, que ofreció interpretaciones con flauta y violín. La entrega de juguetes cerró la celebración, que dejó una huella imborrable en la comunidad.