SANTO DOMINGO.- En momentos en que el gobierno dominicano e incluso legisladores estadounidenses exigen a la embajada de Estados Unidos que se retracte de su alerta sobre supuesta discriminación racial en el país, la oficina de Aduanas y Protección Fronteriza prohibió desde este miércoles el desembarco de cargamentos azucareros del Central Romana por supuestos maltratos laborales.
El CBP, por su sigla en inglés, indicó que identificó cinco de los 11 indicadores de trabajo forzoso de la Organización Internacional del Trabajo, que son:
Además de representar un nuevo escalón en la reciente tensión diplomática con Estados Unidos, la retención de embarque tiene un impacto económico significativo para el país.
Para la zafra 2021-2022, la producción autorizada al Central Romana, de 356 mil 500 toneladas médicas de azúcar equivalen al 57.5 por ciento de la producción azucarera nacional.
Central Romana cuenta además con el 62.84 por ciento de la cuota de exportación al mercado preferencia de Estados Unidos y la Unión Europa, que equivale a 116 mil 465 toneladas métrica valor crudo.
La decisión del gobierno estadounidense, que según la embajada no está vinculada a temas migratorios, recibió el rechazo inmediato de autoridades dominicanas y del propio Central Romana, que asegura haber invertido sumas millonarias para mejorar la calidad de vida de sus trabajadores, muchos de ellos de origen haitiano.
La prohibición estadounidense a la importación de productos azucareros del Central Romana ocurre luego de una década de investigación en la que presuntamente se detectaron trabajos forzados y maltratos a los trabajadores, de acuerdo con el encargado de Negocios de la embajada estadounidense.
Dado que Central Romana es un ingenio de capital estadounidense debe cumplir con los estándares laborales de ese país y por ello Robert Thomas insiste que “las empresas no tienen carta blanca para no cumplir con sus responsabilidades”
El diplomático aseguró que entre las irregularidades encontradas en las visitas al ingenio destacan: “la creación de duras condiciones laborales, oferta de viviendas inadecuadas, oferta de salarios extremadamente bajos
Thomas aclaró, luego de participar como invitado en el almuerzo mensual de la Cámara Americana, que está decisión no tiene ninguna influencia política ni está vinculada a las quejas de diversos organismos contra las deportaciones de inmigrantes haitianos.
Aunque sin referirse a la reciente alerta de la embajada estadounidense sobre presunta discriminación racial en los puestos migratorios del país, Thomas reconoció la soberanía de la República Dominicana para aplicar sus políticas migratorias siempre y cuando respete las garantías individuales.
La empresa Central Romana Corporation indicó en un comunicado que los señalamientos de Estados Unidos no reflejan las políticas y prácticas que por más de un siglo la han caracterizado.
La compañía azucarera expresa que ha destinado sumas millonarias para mejorar las condiciones de vida y trabajo de sus empleados.
Detalló que “Mantenemos la cabeza en alto porque sabemos que durante más de un siglo hemos actuado correctamente, enfrentando los retos con determinación y gestionando su resolución de manera constante”,
El diplomático indicó además que Estados Unidos estaría dispuesto a trabajar con la industria azucarera nuevamente, si decide tomar un camino diferente.