SANTO DOMINGO.- La Conferencia del Episcopado Dominicano afirmó que la corrupción pública es un tema que ha movilizado a la sociedad civil dominicana en los últimos años y pidió que esa indignación contra algunos políticos se vea acompañada por una revisión de vida personal en todos los niveles, para no caer en la mala práctica de solo ver la paja en el ojo ajeno.
En una carta pastoral con motivo del 27 de Febrero, el máximo organismo de la Iglesia Católica reiteró su rechazo a la legalización del aborto y consideró que esa postura es un grito de alerta en contra de una sociedad que se organiza sobre valores utilitaristas.
“Y al mundo mostremos que somos hermanos”, con esta frase del patricio Juan Pablo Duarte, el Episcopado dominicano tituló el documento donde hace referencia a varios temas de interés nacional incluyendo el de la corrupción y presentando sus orientaciones a la luz de la fe cristiana.
Los obispos dzicen que la “La corrupción estatal hiere la sensibilidad universal que reclama un trato igualitario para todo ser humano y atenta directamente contra la integridad de toda la sociedad, pues desvía los fondos necesarios para implementar las políticas sociales”.
Y resaltan que “La denuncia de la corrupción en el Estado pone de manifiesto el sentido de justicia que emana de la dignidad humana”
Los obispos reiteraron su postura de rechazo al aborto y lamentaron que el mundo se encuentre ante lo que el papa Francisco denomina.
El Episcopado adviezrte que en el fondo “No se considera ya a las personas como un valor primario que hay que respetar y amparar, especialmente si son pobres o discapacitadas, si ‘todavía no son útiles”.
En cuanto al tratamiento de los inmigrantes, los obispos expresaron que se debe estar atento para no cultivar un sentimiento nacional exacerbado, que acabe por excluir al extranjero o al diferente, mucho menos en nombre de la fe cristiana.
En su Mensaje emitido cada año con motivo de la Independencia Nacional el Episcopado habló de la importancia del amor fraternal y llamaron a procurar construir ese espíritu en el hogar.
Invitaron a la Pastoral Familiar a realizar un simposio abierto para plantear las bases de una auténtica política pública familiar para la sociedad dominicana.