Obispos respaldan conservar Loma Miranda y aprobar ley de partidos

Difusión televisiva y radial (1)SANTO DOMINGO, República Dominicana.– La Conferencia del Episcopado Dominicano propugnó por la declaración de Loma Miranda como parque nacional y por la aprobación de la Ley de Partidos Políticos en su tradicional mensaje especial con motivo del Día de la Independencia Nacional, en el que critica con dureza el clientelismo político.

Los obispos citan en su documento la lucha por Loma Miranda como símbolo y ejemplo de la participación ciudadana en política sin que sea necesario que ese activismo se manifieste desde un partido.

“Tal es el caso de la conquista del 4% del PIB para la educación, el rechazo a la instalación de una cementera que afectaba la ecología en las inmediaciones del Parque Nacional de los Haitises, la revisión del contrato con la Barrick Gold Pueblo Viejo y la defensa de Loma Miranda, la cual esperamos de las autoridades sea declarada por ley parque Nacional”, reza el mensaje.

La cúpula católica en el país exhortó a los fieles laicos a participar activamente en la vida política, en la vida cívica y comunitaria, de manera honesta y transparente. “Hacerse presente en toda la dinámica social hasta que a cada ciudadano se le dote de educación, salud, energía eléctrica, agua potable, vía de comunicación, vivienda digna, fuente de trabajo y seguridad ciudadana”.

Con un preámbulo que cita como referencia a varios filósofos y figuras históricas, la Conferencia del Arzobispado Dominicano critica el ejercicio político en el país y urge la aprobación del proyecto de ley de partidos políticos que el Congreso no termina de aprobar.

“Es urgente la aprobación de la Ley de partidos políticos que deje de lado el aspecto clientelar y tenga como orientación fundamental del bien común; debe priorizarse la educación cívica y política  en las escuelas y en la población; que se independicen y se separen de verdad los poderes del Estado”, proclaman.

Hacen referencia, por ejemplo, a la novelista y ensayista española Emilia Pardo Bazán, quien resalta que la política es vista por muchos como “mentira, engaño, negocio, corrupción, inmoralidad, demagogia y suciedad; ya que muchos se cubren con el manto de la política para sus intereses egoístas y bastardos, apostasías y vilezas”.

“Nosotros los dominicanos no somos una excepción, porque hemos padecido tantos engaños y frustraciones que hasta hemos empezado a dudar de los hombres y mujeres (reservas que todos deberíamos admirar) que aún ven la política como un modo de servir a la patria y que entienden que ese modo de los malos políticos, es la parte patológica o enfermiza de la política que ha terminado en clientelismo, olvidando su esencia de ser, ciencia del bien común” comentan los obispos.

El mensaje reivindica a la política como una actividad digna en esencia, para lo que se remite a la expresión de Juan Pablo Duarte, el ideólogo de la Independencia Nacional, que se conmemora cada 27 de febrero. Rememora cuando el padre de la Patria dijo que después de la filosofía la política es la ciencia más noble.

Por tanto, justifica que la iglesia y sus fieles hagan incidencia sobre de temas que se salen de lo religioso.

Con sus comentarios sobre Loma Miranda la Conferencia del Episcopado sintoniza con la lucha del sacerdote Rogelio Cruz, quien lidera, junto a líderes de izquierda y comunitarios, la lucha contra la explotación minera de Loma Miranda y en muchas ocasiones ha chocado con la visión de la cúpula diocesana.

Pero los obispos también citaron en su documento el derecho de los ciudadanos extranjeros y migrantes, un tema en el que también ha habido posiciones encontradas en la iglesia católica.

“Aunque la Biblia no nos ofrece, ni tiene por qué ofrecernos, algún modelo de organización para la sociedad, a este respeto siempre serán válidas las palabras de la Conferencia de los Obispos de Francia, cuando puntualizaba que en ella “aparecen una serie de exigencias éticas, definidas de forma absolutamente clara; como son: el respeto a los pobres, la defensa de los débiles, la protección de los extranjeros, la desconfianza frente a la riqueza, la condena del dominio ejercido por el dinero, la destrucción de los poderes totalitarios”.