Pese a que aún se observan esporádicas escaramuzas entre los dos bandos enfrentados, la misión de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) afirmó que el ambiente en el que las partes beligerantes negocian el alto el fuego es «constructivo».
En una conferencia de vídeo mantenida este sábado a tres bandas todos coincidieron en que la situación ha mejorado en el este de Ucrania, escenario hace poco de encarnizados combates entre el Ejército y los insurgentes.
«Todos los participantes en la conferencia se mostraron convencidos de que la violencia ha disminuido, mientras que en un 70 por ciento de territorio de la línea de choque la situación se ha normalizado», según el comunicado del organismo.
La OSCE llamó «positiva» esa tendencia y subrayó la necesidad de que ésta se mantenga en el futuro.
«Las partes no escatimarán fuerzas para reforzar el régimen del cese el fuego», constataron representantes de la organización al tiempo que hicieron hincapié en la necesidad de reconstruir las infraestructuras dañadas por los combates en las regiones de Donetsk y Lugansk, donde se concentran los separatistas.
Los participantes de la conferencia abordaron en particular «las cuestiones relacionadas con el abastecimiento de agua, electricidad y comunicaciones de ferrocarriles», señala la nota.
Sea como sea, la ciudad de Donetsk amaneció hoy de nuevo bajo fuertes cañonazos, según la alcaldía del principal bastión de la sublevación prorrusa.
Sin especificar si hubo víctimas o daños materiales, la administración local denunció nuevos disparos de artillería en las afueras de esa urbe poblada por casi un millón de personas.
El ayuntamiento señaló que la mayoría de las instalaciones de infraestructura funcionan con normalidad, sin embargo, en varios distritos hay problemas de abastecimiento de agua.
Según testimonios recogidos por la prensa local, dichos problemas los experimentan particularmente las estaciones de abastecimiento de Yuzhni Úzel, Petrovski y Kirovski.
Mientras, los dirigentes de la autoproclamada república popular de Donetsk (RPD) informaron hoy de que han suspendido el canje de prisioneros con el Gobierno de Ucrania acordado en el Protocolo de Minsk del pasado 5 de septiembre.
Los separatistas denunciaron que las personas entregadas por las autoridades ucranianas a cambio de sus soldados no son combatientes prorrusos.
«Hemos suspendido el intercambio de prisioneros con la parte ucraniana. Se debe a que las personas intercambiadas por Kiev no son las que demandamos en nuestras listas», dijo el primer ministro de la formación, Alexandr Zajárchenko, citado por la agencia rusa Interfax.
Precisó que «en realidad, los servicios especiales ucranianos detenían a (otra) gente procedente de Donbass (cuenca hullera que incluye las dos regiones con presencia de separatistas, Donetsk y Lugansk) en Kiev y les cambiaban por sus militares».
«A la gente que demandamos no nos entregaron», lamentó.
Zajárchenko subrayó que el tema del canje de prisioneros será abordado durante la próxima reunión del grupo de contacto en Minsk que se espera que se celebre hasta el fin de la próxima semana.
El intercambio de prisioneros según la fórmula «todos por todos» es uno de los doce puntos del acuerdo de alto el fuego alcanzado el pasado días 5 en Minsk por el Grupo de Contacto para la crisis ucraniana (Ucrania, Rusia y la OSCE, con la participación de representantes de las milicias prorrusas).
Las regiones orientales de Donetsk y Lugansk viven estos días una tregua frágil, amenazada por esporádicas escaramuzas -pese a lo acordado en el Memorándum de Minsk el pasado sábado- de las que se acusan mutuamente los dos bandos enfrentados.
