Valerie Julliand.
SANTO DOMINGO, República Dominicana.- La ONU centrará su acción en la República Dominicana en 2013 en los más pobres, en las mujeres, en los jóvenes y niños y en la sostenibilidad ambiental, con una «atención especial al ser humano», dijo este viernes la coordinadora residente del organismo multinacional, Valerie Julliand.
La inclusión social y económica de los pobres; el empoderamiento de la mujer, la lucha por sus derechos y contra la violencia de género y el derecho a la salud, a la educación, al trabajo y a la participación política de los jóvenes son algunas de las líneas de la estrategia que desplegarán el próximo año las agencias de la ONU en el país.
En un encuentro con medios de comunicación internacionales, Julliand subrayó acciones de contenido social que viene implementando la organización en temas que afectan a la mujer, como la violencia o los embarazos de adolescentes, así como en favor de las personas emigrantes e indocumentadas.
En ese sentido mencionó programas llevados a cabo con la Junta Central Electoral (JCE) para lograr la identificación de los dominicanos desde su nacimiento (en la actualidad se calcula que el 30 % de los menores de 15 años no tiene documentos) y señaló que uno de los programas desarrollados ha permitido documentar a unas 20.000 personas.
El representante del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) Gonzalo Vargas Llosa, indicó que en el último año se ha reactivado la Comisión Nacional para los Refugiados, y dijo que el actual presidente, Danilo Medina, ha impulsado todavía más este órgano, que debe evaluar 200 solicitudes de asilo en un plazo de seis meses.
Uno de los programas de Acnur realizado en colaboración con el Consulado de Haití en la República Dominicana ha permitido conseguir actas tardías de nacimiento y pasaportes para unos 4.000 haitianos, según Vargas Llosa, quien abogó por un compromiso claro de ambos países para poner en marcha planes integrales de documentación.
Se estima que cerca de un millón de haitianos residen en la República Dominicana, la mayoría de forma ilegal, dedicados a trabajos en sectores como la agricultura, el turismo, la construcción y actividades informales.
También la oficial de ONU-Sida en el país, Ana María Navarro, resaltó la importancia de que tengan documentos todos los ciudadanos, pues el 30 % de las personas en tratamiento en los programas de esta agencia contra el VIH Sida son inmigrantes o personas sin documentos.
Explicó que no podrán recibir asistencia si carecen de documentos cuando el Estado asuma el programa que gestiona este organismo, en 2015, ya que solo las personas documentadas son beneficiarias de la Seguridad Social.
Por otra parte, sobre la reforma fiscal impulsada por el presidente dominicano, Danilo Medina, que ayer aprobó el parlamento dominicano con el objetivo de conseguir 1.179 millones de dólares para paliar el déficit fiscal, la coordinadora residente de la ONU dijo que «el país tiene que reformarse» y abogó por un sistema fiscal progresivo.
Julliand consideró comprensible el descontento que la medida ha generado en amplios sectores del país, pero -aseveró- «no vamos a interferir en decisiones del Estado», al tiempo que expresó la disposición de la ONU a apoyar al Gobierno en los aspectos que puedan mejorar la reforma.
También se refirió al modelo turístico del país y señaló que el actual «ha hecho daño al medio ambiente», por lo que la ONU ha alertado en varias ocasiones al Ejecutivo de que «de no cambiar este modelo, se agotará en pocos años la gallina de los huevos de oro» que representa la industria turística, uno de los pilares de la economía del país.
