El gobierno neerlandés acordó un paquete inicial de 2.200 millones de euros para reducir las emisiones de nitrógeno, enfocándose en los ganaderos que disminuyan su actividad de forma voluntaria.
La Haya.– La Haya.- El Gobierno neerlandés llegó este viernes a un primer acuerdo sobre un “paquete inicial” para financiar medidas que permitan reducir las emisiones de nitrógeno en las zonas naturales protegidas, y destinará 2.200 millones de euros a promover que los ganaderos reduzcan su actividad o la cesen de forma voluntaria.
Según anunció la coalición del Gobierno neerlandés tras el consejo de ministros de este viernes, la reducción de emisiones comenzará en las áreas naturales más afectadas, los parques de De Veluwe y De Peel, porque “la urgencia es mayor” en esas zonas. Entre las acciones previstas se incluyen incentivos para que ganaderos reduzcan las cabezas de ganado o cesen voluntariamente su actividad.
Además, el documento oficial “Paquete inicial para desbloquear Países Bajos”, presentado por la ministra de Agricultura, Femke Wiersma, contempla una reforma del sistema de concesión de permisos ambientales y la introducción de un “límite matemático mínimo” para la emisión de nitrógeno, con el fin de simplificar y agilizar los trámites burocráticos.
El paquete establece una meta de reducción del 42 al 46 % en las emisiones del sector agrícola para 2035, en comparación con los niveles de 2019, aunque para la industria, la construcción y la movilidad, el objetivo asciende al 50 %.
Esta propuesta fue objeto de polémica incluso antes de su publicación oficial hoy. Tras la filtración de algunos detalles el miércoles, surgieron críticas por parte de las provincias y organizaciones ecologistas, que ya han anunciado acciones legales contra el plan. En la versión final se eliminaron algunas medidas que habían causado controversia, como el límite de velocidad de 80 kilómetros por hora (en lugar de 100) en las inmediaciones de zonas protegidas.
“Para mí, es clave tener planes realistas, viables y sostenibles, para poder dar seguridad a los empresarios. Al mismo tiempo, soy consciente de que les pediremos mucho. Es bueno poder empezar con estas primeras medidas y contar con una base sobre la que construir junto a las partes implicadas”, dijo hoy la ministra Wiersma.
La reducción de nitrógeno es uno de los temas más delicados del panorama político neerlandés, puesto que las emisiones afectan directamente a la naturaleza y limitan la concesión de nuevos permisos para actividades económicas como la agricultura, la construcción de viviendas o la expansión de infraestructuras.
Las soluciones a estos problemas implican decisiones que impactan en sectores clave para Países Bajos, como el campo, y en los votantes de ciertos partidos, como el de los ganadores BBB, uno de los socios de la coalición del Gobierno que rechaza la compra forzada de explotaciones ganaderas, un planteamiento que ha estado sobre la mesa con el gabinete anterior.
Por otro lado, la Comisión Europea se mantiene vigilante a la aplicación de estas nuevas medidas y al cumplimiento de los reglamentos comunitarios.
"Los Países Bajos deben establecer y aplicar medidas eficaces para reducir los nitratos y la contaminación por nitrógeno a fin de cumplir los requisitos de la UE en materia de naturaleza y calidad del agua", dijo a EFE el portavoz comunitario de medioambiente, Maciej Berestecki, añadiendo que corresponde a las autoridades neerlandesas decidir cuales son las medidas que garanticen alcanzar los objetivos acordados.