Relató que su carrera se forjó en la práctica, sin descartar la importancia de la educación formal.
SANTO DOMINGO. - Durante una entrevista en el programa El Despertador, la comunicadora, actriz presentadora y productora ejecutiva, Pamela Sued compartió uno de los momentos decisivos de su vida profesional: el día que optó por dejar la universidad para dedicarse de lleno al mundo de la televisión. La decisión no fue sencilla, pero marcó el inicio de una trayectoria que ha sabido consolidarse sin un título universitario.
Comentó que cuando termino el colegio apenas iniciaba sus estudios universitarios y llegó la la propuesta de trabajar con Don Freddy Beras Goico.
"Me vi en el dilema de que, o asumo de lleno la carrera universitaria y la termino, o aprovecho esta oportunidad que tengo y aprendo en la práctica. Y esa fue mi decisión”,explicó.
La comunicadora aclaró el impacto público que tuvo su revelación. “Se armó toda una situación porque, bueno, se fue viral la gente empezó...Con mi historia no quiero decirle absolutamente a nadie que no estudie, o que no es importante. ¡Claro que lo es!”.
Pamela distinguió su caso particular de otras profesiones: “Hay carreras que, evidentemente, te exigen también tu título universitario. Yo no entro a un quirófano a operar. Yo no subo a un estrado. Yo no ando haciendo un plano”.
La televisión: un oficio que también exige preparación
Aunque no terminó la carrera, Sued enfatizó que su formación ha sido constante.
“Lo mío es una carrera que tiene que ver con talento, con dones y con preparación. Pero una preparación también distinta. Es actualizarme todo el tiempo”.
De hecho, no descarta volver a estudiar: “Tampoco digo que no está quizás dentro de mis planes o que me haga ilusión en algún momento tener un título. Y puedo hacerlo, ¿por qué no?”.
Trabajo, ética y responsabilidad
Pamela atribuye parte de su disciplina profesional a lo aprendido en casa y a las figuras que marcaron su camino, como su padre José Guillermo Sued y Don Freddy.
“Me tocó así y yo no me puedo sentir avergonzada de mi historia. Al contrario, estoy orgullosa de lo que yo pude en un momento de inmadurez, quizás, decidir y que me saliera bien”, dijo.
“Pero no me salió bien también fortuitamente. Me salió bien porque lo asumí con mucho respeto, con mucha dignidad, con mucha responsabilidad”.