SANTO DOMINGO (República Dominicana).– Con emotivos reencuentros familiares, con distanciamiento físico y con apego a los protocolos del Ministerio de Salud Pública, se reiniciaron el fin de semana las visitas a los privados de libertad que, para evitar contagios por COVID-19, se limitan a uno de los parientes más directos.
Los 22 Centros de Corrección y Rehabilitación (CCR) del Modelo de Gestión Penitenciaria recibieron visitas familiares para 1,372 privados de libertad, de los cuales el 87% fueron mujeres.
Los CCR seguirán recibiendo parientes los fines de semana, con un calendario administrado por citas, en el que los visitantes seleccionados por los propios internos acudirán cada 15 días.
Este lunes iniciaron las visitas en la Penitenciaría Nacional de La Victoria, con 230 personas citadas por igual número de internos.
Los privados de libertad reciben a sus familiares en cinco turnos, con horarios distintos para evitar aglomeraciones.
Por disposición del Ministerio de Salud Pública, el recibimiento a parientes y amigos de los internos del Sistema Penitenciario se había suspendido desde el 27 de marzo de 2020, debido a los focos de contagio por COVID-19.
La enfermedad ha provocado 22 fallecimientos dentro de la población privada de libertad, de alrededor de 1,500 personas afectadas por coronavirus, de las más de 27,000 alojadas en el sistema penitenciario dominicano.
La primera etapa de apertura, autorizada por el Ministerio de Salud, abrió los centros a los abogados para garantizar el derecho a la defensa de los privados de libertad. Igual a como se hace con los familiares, los profesionales del Derecho siguieron un estricto control del distanciamiento físico, utilizando mascarillas ambas personas y observando las medidas de higiene para prevenir la posibilidad de contagio.
Las autoridades penitenciarias siguen los lineamientos del Ministerio de Salud Pública y se mantienen vigilantes para evitar cualquier foco de contagio del coronavirus que obligue a suspender las reiniciadas visitas.