SANTO DOMINGO. –La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha manifestado preocupaciones significativas sobre la discriminación racial al asegurar que, en la República Dominicana se ha arraigado las prácticas discriminatorias contra mujeres haitianas o de ascendencia haitiana en estado de embarazo.
Durante el 188º periodo de sesiones, la CIDH revisó denuncias respaldadas por evidencias audiovisuales que señalan operativos de control migratorio en hospitales dominicanos, dirigidos de manera desproporcionada hacia estas mujeres afrodescendientes.
Según la CIDH, estas acciones se enmarcan en un contexto histórico de discriminación arraigada, exacerbado por factores como el racismo, el colonialismo y la esclavización.
Sin embargo, el Estado dominicano ha negado que estas prácticas sean habituales, asegurando que el sistema hospitalario brinda atención médica sin discriminación por estatus migratorio, y destaca que, entre enero y agosto de 2023, el 35.24% de los partos en el país fueron de mujeres haitianas, según los Datos del Repositorio de Información y Estadística del Servicio Nacional de Salud (RIESS).
Además de la discriminación en hospitales, la CIDH expresó preocupación por los obstáculos continuos para la obtención de documentos de identidad y la señala la necesidad de «restitución de la nacionalidad dominicana para personas haitianas y dominicanas de ascendencia haitiana», afectadas por decisiones judiciales y administrativas restrictivas.
Aunque se han realizado esfuerzos para regularizar el estatus de estas personas a través de iniciativas como el Plan Nacional de Regularización de Extranjeros, la CIDH considera que aún persisten desafíos significativos en la obtención de documentación legal.
El Gobierno ha expresado, que se han expedido documentos de identidad a 60,773 personas identificadas por la Junta Central Electoral (JCE), pero muchas no han recogido estos documentos. Además, decretos presidenciales han otorgado la naturalización a 799 personas y se están tomando medidas para facilitar la estancia regular de estas personas en el país.
La CIDH advirtió que continuará vigilando de cerca la situación, destacando la importancia de medidas efectivas para prevenir y remediar la discriminación racial en todas sus formas en la República Dominicana, en línea con los estándares internacionales de derechos humanos.
La Comisión destacó la creación de un portal digital para denunciar abusos sexuales contra menores, así como la política del Ministerio de Educación de no negar la educación a menores por falta de documentos de identidad o recursos económicos. Sin embargo, también compartió la preocupación por la alta incidencia de uniones tempranas y embarazos adolescentes, subrayando la necesidad de fortalecer la educación sexual integral.
Finalmente, la CIDH reiteró su preocupación por el hacinamiento y las condiciones deplorables en las cárceles dominicanas. Con una tasa de hacinamiento del 163.4%, la situación es especialmente crítica en las cárceles de La Victoria, Bani, Azua, San Juan de la Maguana y Barahona.