SANTO DOMINGO, República Dominicana.- La Plaza Juan Barón se ha convertido en fuente de sustento para vendedores y pequeños comerciantes, sin embargo, éstos se quejan de que las ventas han mermado debido a la precaria situación económica.
Las opciones de comidas y bebidas se distribuyen en siete casetas, pero al lugar incursionan también los vendedores ambulantes con una gran diversidad de ofertas.
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Un lugar con la brisa fresca del mar y con una amplia oferta gastronómica ofrece a sus visitantes una opción para divertirse.
Las personas pueden disfrutar de karaokes, bailes y bebidas. Y además los pequeños tienen su espacio para patinar, montar bicicletas, coches, y saltar.