REDACCIÓN.- Cientos de personas en horario de toque de queda tomando alcohol y fumando Hooka, sin cumplir ningún protocolo ni distanciamiento, carros con música a alto volumen hasta las cuatro de la madrugada, es lo que se vive todos los fines de semana en el barrio Los Mina del sector Guaricanos.
Los residentes del sector denuncian que se cansan de llamar al Departamento Anti-Ruidos de la Policía Nacional y no pasa nada porque cuando la policía llega al lugar son sobornados y se van.
Dicen que necesitan de la colaboración de los medios para erradicar esa situación que está acabando con la paz y tranquilidad de la comunidad y atentando contra la salud con el riesgo de contagiarse de COVID-19.