SANTO DOMINGO.– Durante la Semana Mayor los sacrificios tienen un lugar importante, resaltando el ayuno y el abstenerse a comer carne, con mayor énfasis en días específicos como el primer día de la cuaresma, que inicia con el Miércoles de Ceniza y el Viernes Santo.
Las habichuelas con dulce es parte del resultado del llamado «Menú Sin Carne» y la razón por la que se come en esta fecha es la transculturación de los habitantes europeos en nuestro territorio.
Las habichuelas con dulce es una combinación de habichuelas rojas, leche, azúcar, batata, galletas y diferentes especias, un plato que se convierte en el símbolo de la gastronomía dominicana en Semana Santa.
La base de sus ingredientes es una inspiración de un plato francés, que los dominicanos fuimos enriqueciendo con productos locales y de la influencia de otras como la africana. Algunos historiadores coinciden que se acostumbra a comer en horas de la tarde, porque se preparaba luego del acto simbólico de la quema de Judas.
Este plato se consume tradicionalmente el Viernes Santo, y se suele servir con pasas, galletas de leche y/o casabe pasado por el fuego.