Santo Domingo.-La primera dama de la República, Raquel Arbaje, informó este este jueves la situación de la comunicadora Nicole Lamourtte Román, de 27 años y su un embarazo de 33 semanas.
Arbaje reveló a través de su cuenta de X (antes Twitter) que Lamourtte Román fue evaluada por el doctor Pedro J. Sureda Valeyrón, reconocido cirujano pediátrico de la Clínica Corazones Unidos en Santo Domingo. La evaluación médica se realizó para analizar las condiciones del feto y determinar los pasos a seguir en relación con el diagnóstico de una hernia diafragmática izquierda.
El diagnóstico, confirmado a través de estudios de imagen como una sonografía obstétrica y una resonancia magnética nuclear (RMN), revela la presencia de una hernia diafragmática congénita en la criatura, que ha provocado que parte del estómago y colon izquierdo se desplacen hacia la cavidad torácica, sin que hasta el momento se hayan identificado otras malformaciones congénitas.
Según el informe del doctor Sureda, la intervención quirúrgica para corregir este defecto podría llevarse a cabo con éxito en el país, bajo la supervisión de un equipo multidisciplinario.
Cuidados y plan de intervención
En una reunión sostenida entre la paciente, sus familiares y el equipo médico, el doctor Sureda explicó que al momento del nacimiento, la recién nacida deberá ser estabilizada en una Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales (UCIN) antes de ser sometida a una cirugía en los primeros días de vida. El procedimiento quirúrgico consistirá en reposicionar los órganos desplazados hacia el tórax para cerrar el defecto en el diafragma.
El pronóstico dependerá en gran medida del desarrollo de los pulmones de la bebé, ya que en casos de hipoplasia pulmonar—una posible complicación—podría requerirse un soporte avanzado de oxigenación, como la Oxigenación por Membrana Extracorpórea (ECMO). Aunque este tratamiento no siempre es necesario, el equipo médico está preparado para cualquier eventualidad que pueda surgir.
Se espera que, tras la intervención, la recuperación de la recién nacida sea monitoreada de cerca hasta que pueda superar la fase crítica y estabilizarse de manera definitiva.
Este caso subraya la importancia de la colaboración entre instituciones gubernamentales y el sistema de salud para garantizar atención médica especializada en situaciones de alto riesgo, brindando esperanza tanto a la madre como a la familia.