Todavía no me explico, ni salgo del asombro de saber que cinco o seis Mega Malls, construidos casi todos por Miguel Vargas con capital extranjero, en su mayoría proveniente de Venezuela, tengan más de un 35% de cada uno de ellos Vacíos. A quien realmente les están haciendo competencia voraz son a las tiendas que están fuera de los Malls, que tarde o temprano estarán obligadas a cerrar.
¿Viven llenos? Pues claro…. Usted puede tomarse un café, un refresco, comerse un sándwich en un ambiente confortable, con excelente aire, donde jevitos y jevitas pueden figurear a riendas sueltas. La finalidad de estos lugares es que las tiendas vendan, pero parece que todavía no está cumpliendo esa finalidad. Usted puede sentarse a observar las ventas y rápidamente puede ver que hay pocas personas con bolsas de compras en las manos. Mucha gente se hace la pregunta ¿esos dineros son del lavado? por la cantidad que ven hechos y por los que se siguen construyendo. ¿Será que los jodedores les soltaron los chuchos a las torres residenciales y ahora están metidos en los centros comerciales? Solo basta una vueltecita entre la Luperón, Churchill, Gómez, 27 y la Bolívar para rápidamente llegaran a la conclusión de que esos apartamentos aún no se venden, ni se alquilan, ni tienen letreros de financiamiento de bancos, a pesar del tiempo que tienen construidos. Todavía nos seguimos preguntando: ¿De dónde sale tanto dinero?
¿Acaso será este el paraíso de los dineros provenientes de los mal habidos y de los nuevos millonarios de nuestro país? ¿De esos corruptos del mundo que el Papa acaba de llamar Anticristos? Esto no es desarrollo económico, sino más que un crecimiento de peces capitalistas en un estanque, en donde los más grandes se comen a los más pequeños.
Conjuntamente con estas realidades aparecen otras totalmente opuestas que se desarrollan a todo lo largo y ancho de este país. No hay ningún barrio seguro en territorio dominicano, cual sea la provincia. Personas que son ladrones, criminales en todos los niveles; asesinos a sueldo, sean estos civiles o militares. Estos delincuentes, que muchos no tienen empleo, desean entrar en esos centros comerciales a disfrutar del confort que estos ofrecen al cuerpo y a la vista.
Hasta ahora no han entrado a estas majestuosas edificaciones. Pero si las cosas siguen como van no dude usted que estos mañana ocupen de formas violentas estas casas de exposiciones de la buena vida.
¿Quién es el gran beneficiario de la mayoría de estas construcciones? Pues es nada más y nada menos que Miguel Vargas….
Él es ahora mismo el gran triunfador de la construcción en el país, directamente proporcional a su total fracaso en la materia política. Es un excelente administrador en edificaciones pero un pésimo administrador en la política.
Lo que construye con sus manos de arquitecto lo destruye con sus pies de político.
Qué pena no saber distinguir una cosa de otra….