SANTIAGO.- El torpedero Ramón Torres, se mostró positivo y entusiasmado de volver a una segunda temporada con el equipo amarillo y su meta es demostrar que lo que pudo hacer fue fruto del trabajo no de la casualidad.
“Nosotros como profesionales siempre sentimos un poco de presión, pero en mi caso me mantuve trabajando fuerte durante la temporada entera, nunca bajé la cabeza, aprovechando cada oportunidad que me dieron y nada vino por casualidad, creo que todo ese trabajo que yo hice fue lo que me dio el éxito para poder ayudar al equipo” , aseguró Torres.
El jugador está siendo proyectado como el campocorto regular de la primera parte de la campaña que inicia el 27 de octubre, luego de que hiciera un trabajo excelente para los aguiluchos y luego para el equipo dominicano en la Serie del Caribe y en el repechaje olímpico en México.
Pese a que había reforzado a las Águilas para el «Todos Contra Todos» de la semifinal del 2019-2020, Torres se vistió de aguilucho oficialmente en la pasada temporada, mediante un cambio con su antiguo equipo, los Gigantes del Cibao, que recibieron al lanzador Richelson Peña.
Al convertirse en el héroe inesperado para las Águilas cuando en el quinto partido de la final frente a los Gigantes, logró 4 hits en 5 turnos, anotando una carrera y remolcando tres lo que permitió oxigenar a los campeones nacionales y del Caribe.
“El año pasado fue demasiado bonito, imagínate fue mi primer campeonato sabemos que no será fácil volver a repetir y estamos conscientes que hay que trabajar más duro cada año y en lo personal estoy trabajando duro para la meta que es lograr la corona número 23 y repetir esa alegría”, asegura.
Ramón Torres estuvo con el equipo dominicano en el Torneo Preolímpico, ayudando al país con su bate y guante para lograr la clasificación a los Juego Olímpico, experiencia que dice nunca olvidará.