SANTO DOMINGO.- La vicepresidenta de la República, Raquel Peña dijo que la República Dominicana se mantiene vigilante ante la amenaza de la nueva variante del COVID-19, ómicron, que ya ha incidido en otros países.
Explicó que los mecanismos de mitigación de impacto se mantienen activos ante la posibilidad de que nuevas variantes de riesgo puedan ingresar a territorio dominicano, como es el caso de la variante ómicron, “que se presenta con 32 mutaciones y una aparente mayor capacidad de transmisión, pudiendo retrasar la vuelta a la nueva normalidad que tanto anhelamos a nivel local y mundial”.
La también coordinadora del Gabinete de Salud, expuso que estos mecanismos son las estrategias de prevención no farmacológicas (uso de mascarillas, distanciamiento social y lavado de manos), así como también la accesibilidad a pruebas de diagnóstico, de vacunas, de tratamiento antiviral y la implantación de rastreo de contactos en zonas en que hay aumento de la positividad al virus.
Al exponer el tema “El impacto y manejo del COVID-19 en la República Dominicana”, en el “Foro Global de Casa de Campo: Tendencias de un mundo en transformación”, que se lleva a cabo en el país, dijo que «el Gobierno dominicano dio la prioridad que se merecía a la gestión sanitaria en nuestro país», afirmó Peña.
Indicó que el gobierno comprendió que la única vía para retomar las actividades productivas con seguridad era inocular a la mayor cantidad de residentes en nuestro país, por lo que desde que asumieron el poder, todas sus acciones estuvieron encaminadas a iniciar los trámites para adquirir los biológicos para toda la población.