Santo Domingo.- La dirección del Fideicomiso RD Vial pidió a los conductores que, ante los efectos del huracán Beryl, eviten tomar las carreteras salvo en los casos en que sea indispensable, muy especialmente aquellas vías que están ubicadas en las provincias que están bajo alerta.
El director del RD Vial, Jean Luis Rodríguez, llamó a los conductores a ser prudentes, “teniendo en consideración que las vías nunca son tan vulnerables y peligrosas como cuando están sometidas a las inclemencias del tiempo, como las que se esperan en las próximas horas con el huracán Beryl”.
Asimismo, destacó que desde la dirección de operaciones de esta entidad se encuentran monitoreando el fenómeno, con el propósito de tomar las medidas necesarias desde sus competencias para contribuir en la protección de los ciudadanos que se desplazan por las vías.
Este martes, el Centro de Operaciones de Emergencia (COE) mantene en alerta roja a las provincias de Barahona y Pedernales, mientras que, en alerta amarilla a Peravia, Santo Domingo, Distrito Nacional, San Cristóbal, Azua, Sánchez Ramírez, Independencia, La Vega, Monseñor Nouel, San José de Ocoa y Monte Plata.
En Alerta verde están Puerto Plata, Santiago, La Altagracia, Espaillat, Bahoruco, Elías Piña, La Romana, San Pedro de Macorís, Hato Mayor, Hermanas Mirabal y San Juan.
Las carreteras se vuelven extremadamente peligrosas durante condiciones climáticas severas como las causadas por un huracán. La visibilidad reducida, el pavimento resbaladizo y la posibilidad de inundaciones aumentan el riesgo de accidentes. Conducir en estas condiciones no solo pone en riesgo la vida del conductor y sus pasajeros, sino que también puede complicar las operaciones de emergencia y rescate.
Jean Luis Rodríguez informó que RD Vial y la dirección de operaciones están monitoreando continuamente el fenómeno y preparándose para tomar medidas necesarias para proteger a los ciudadanos. Esto incluye potencialmente cerrar carreteras o desviar el tráfico para evitar zonas peligrosas.
La prudencia en situaciones de emergencia es una responsabilidad de todos los ciudadanos. Respetar las recomendaciones de las autoridades no solo protege a los individuos, sino también a la comunidad en general. Es esencial que las personas se preparen adecuadamente antes de la llegada del huracán, asegurándose de tener suministros básicos y un plan de emergencia, en lugar de exponerse innecesariamente en las carreteras.
En la medida de lo posible, se recomienda utilizar alternativas como el teletrabajo y mantener la comunicación a través de medios digitales para reducir la necesidad de desplazamientos, minimizando así los riesgos asociados a la conducción en condiciones adversas.