MÉXICO.- El grupo mexicano Reik es consciente de que «las reglas del juego han cambiado», lo que ha hecho que lancen el sencillo «Me niego» aprovechando la libertad que hay en la industria para llegar a sus seguidores «de manera más eficiente» y seguir experimentando con sus distintas influencias.
Con este tema, el grupo se aproxima al género urbano de la mano de Ozuna y Wisin, a la vez que ofrece a su público nuevo material sin estar atados necesariamente a la creación de una producción discográfica.
«Estamos pensando que vamos a sacar mucha música este año con un formato más libre», dice en una entrevista con Efe el líder vocal del grupo, Jesús Navarro, quien avanza que más tarde, cuando ya hayan lanzado «tres o cuatro canciones» se plantearán si estas quedan o no incluidas en un disco.
No es por falta de canciones, matiza, porque ahora mismo tienen «material suficiente» para hacer diez discos más, sino que es una reflexión hecha desde el grupo sobre «cómo hacer que la gente escuche y conecte con las canciones de mejor manera».
La colaboración de «Me niego» con los dos puertorriqueños vino de forma «muy orgánica». El grupo grabó el tema y más tarde, cuando los productores estaban trabajando en él, «la escuchó Ozuna y se quiso sumar», lo mismo que pasó con Wisin.
«Creo que es algo especial de la manera de trabajar de los artistas urbanos, que están todos muy conectados y están constantemente creando», valora Navarro, quien forma Reik junto con Julio Ramírez y Gilberto Marín.
La fórmula les ha dado buenos resultados: el sencillo sumó más de 17 millones de visualizaciones antes de la primera semana y los ha posicionado en el top 50 de 11 países.
«Estamos abrumados de tanta buena noticia; por supuesto, cuando haces algo con cariño esperas que las cosas funcionen, pero también es algo diferente a lo que habíamos hecho antes», comenta.
Agrega que se están adentrando en el mundo de lo urbano -el cual califican como «solidario», por la manera en que les han abierto las puertas-, pero entendiendo «que lo urbano no es solamente reguetón».
El suyo «sigue siendo un sonido súper pop, melódico y digerible, pero también influenciado por lo que está pasando en el mundo».
Aunque reconoce que a veces cambiar «da miedo», Navarro confiesa que en el grupo, que cuenta con éxitos como «Ya me enteré», están «emocionados de estar viviendo este momento donde, en la industria latina, la tendencia es que los artistas se renueven».
«Nosotros empezamos en una industria donde no era así, donde los exponentes grandes de la música de nuestro país eran artistas que encontraron su sonido, su estilo, y lo repitieron», reflexiona.
Esto nunca ha sido una opción para Reik, que desde su Baja California natal, estado fronterizo con Estados Unidos, siempre han tenido muy presente el mestizaje, por las influencias del pop anglosajón y la de «las letras románticas y la profundidad de la música en español».
Además, siempre han tenido la «curiosidad por experimentar»: «Así lo hemos hecho desde antes de que fuera tendencia y de que la gente lo pidiera», dice el vocalista.
Reik continúa con la gira que toma el nombre de su más reciente disco, «Des/Amor» (2016), pero a la vez trabajan en un proceso de «transición» para hacer un espectáculo diferente.
«El resultado del disco nos ha permitido hacer cosas más grandes aún», refiere Navarro sobre este cambio, con el que sumarán más recursos para intentar ofrecer un concierto más «completo».
Y sobre todo, para seguir manteniendo el que es su objetivo principal: «Conectar y asegurarnos de que la gente pase un rato lindo», concluye Navarro.