Por: Ana Paula González.
Santo Domingo.- Familias que han perdido sus alimentos, madres angustiadas por el bienestar de sus hijos, y personas cuya salud está en riesgo. En el sector Villa Morada, en el distrito municipal de Pantoja, los residentes llevan más de diez días sin electricidad, y el impacto en sus vidas es devastador, según dicen.
David Núñez, es uno de los residentes afectados por las secuelas de los apagones. Él y su esposa, que se encuentra en un estado avanzado de embarazo, han tenido que pasar noches fuera de su hogar.
“No puedo dejar que mi esposa pase por esto. Entre el calor y la falta de ventilación, su salud y la del bebé podrían correr peligro. Tuve que llevarla a casa de mi madre porque aquí no podemos estar así. Esto no es justo; estamos pagando, pero no recibimos el servicio”, dijo David Nuñez, afectado.
La señora Angie Paola, madre de tres hijos, ha visto cómo la comida que había guardado en la nevera se ha echado a perder. La falta de refrigeración ha significado para ella un gasto extra que no puede asumir.
“Ha sido un infierno para nosotros. No solo estamos lidiando con el calor y la falta de luz, sino también con la pérdida de la comida. Mis hijos han tenido que soportar este calor extremo sin siquiera un ventilador. Y yo, que no tengo los recursos para reponer todo lo que se perdió, estoy desesperada”, indicó Angie Paola.
Moradores aseguran que han acudido a Edesur en diversas ocasiones sin obtener respuesta ante los daños colaterales que causan los apagones.
Otro problema que afecta a los residentes es la mala condición de sus calles. A pesar de múltiples visitas a las instituciones pertinentes, hasta el momento no han visto soluciones.