SAN CRISTÓBAL.- Los jueces de la Corte de Apelación de San Cristóbal conocen el recurso elevado por la defensa del sacerdote Aleycer Vivas Ortíz, acusado de abuso sexual contra una niña de tres años, para que se le cambie la medida de coerción que le fue impuesta.
El abogado de la familia de la niña dijo que la menor le ha expresado a por lo menos seis personas, entre ellos psicólogos, que: “su amigo a quien ella reconoce como Jesús, que se viste de negro, con una sotana negra, le pone la mano en sus partes íntimas y le pide que se baje los pantalones”.
La Diócesis de Baní suspendió al sacerdote, de nacionalidad colombiana, que pertenece a la orden de los Agustinos Recoletos.
Al respecto, el obispo de Baní, Víctor Masalles, dijo que se le brinda “a la familia afectada todo el apoyo, acompañamiento y solidaridad que requiere este lamentable caso”.
“Manifestamos nuestra más firme y contundente condena a esta acción lasciva e inmoral, y a toda forma de abuso, especialmente cuando esta es cometida por un sacerdote, de quien menos se podría esperar”, dijo. La Iglesia Católica informó que está colaborando plenamente en el proceso de investigación del cura.