Santo Domingo.- Al rechazar la oferta de mediación de la OEA en tanto Haití no detenga la construcción del canal en Juana Méndez y haya un interlocutor haitiano que controle el territorio de ese país, el poder Ejecutivo dominicano urgió al secretario general del organismo hemisférico, Luis Almagro, a visitar la zona para recabar información y rendir un informe al Consejo Permanente con el fin de “asegurar una solución pacífica” y “prevenir un mayor deterioro” de la relaciones bilaterales.
De inmediato, la sociedad civil y grupos nacionalistas saludaron la posición del gobierno.
Tras el comunicado emitido esta mañana por el gobierno dominicano manifestando sus disposición al diálogo con la condición de que Haití paralice la construcción del canal que desviaría el cauce del Río Masacre, la vicepresidenta Raquel Peña dijo espera que el secretario general de la OEA visite la zona en cuestión, como solicitó el Estado en la misiva.
La respuesta del gobierno dominicano a ese organismo internacional ha sido respaldada por sectores nacionalistas y de la sociedad civil, que además algunos consideran que la frontera debe mantenerse cerrada.
En la misiva, el gobierno señaló que las autoridades haitianas reconocieron en un documento entregado de manera informal que el proyecto carecía de planos al momento de la ejecución y que además debieron suministrar la información relativa a los estudios cartográficos, topográficos, geológicos, geotécnicos, hidrológicos o de impacto ambiental necesarios para poder evaluar los beneficios y riesgos del proyecto.
El gobierno dominicano señaló además que a ambas naciones les conviene un acuerdo para aprovechar las fuentes hidrográficas y que sea respetuoso del tratado de paz y amistad arribado en el 1929.