REDACCIÓN INTERNACIONAL .- El gigante tecnológico surcoreano Samsung Electronics anunció este viernes beneficios operativos por unos 4.3 billones de wones (unos 3,400 millones de dólares), al cierre del cuarto trimestre 2022, lo que supondría un 69 % interanual menos.
Esta cifra sería la consecuencia de la caída de los precios de los chips de memoria y la reducción en la demanda de dispositivos a consecuencia de la desaceleración económica, según la previsión de resultados para octubre-diciembre que publicó hoy la compañía.
Con respecto a sus ingresos por ventas, Samsung espera sumar unos 70 billones de wones (unos 55,000 millones de dólares), lo que supone un descenso del 8.6 % comparado con el cuarto trimestre del año anterior, detalló la compañía.
Como es habitual en sus previsiones de resultados, Samsung no mencionó su beneficio neto ni desglosó los datos de sus ramas de negocio en su informe de previsión de resultados, que serán anunciados de manera integral hacia finales de mes.
Los pedidos del principal producto de la empresa con sede en Suwon (al sur de Seúl), los chips de memoria, se habrían ralentizado ya que el poder adquisitivo de los consumidores se ha debilitado, provocando una reducción de la demanda de chips por parte de los fabricantes de productos electrónicos.
A su vez, se espera que la subida de la inflación a nivel global disminuya la demanda de productos como televisores o teléfonos móviles.
La guerra en Ucrania, la política que mantenía hasta recientemente China de «cero covid» o la inflación hacen que las perspectivas para el final del año pasado no sean buenas para Samsung, puesto que las ventas de dispositivos electrónicos continuarán cayendo a nivel global, lo que promete arrastrar a su vez a la industria de los semiconductores.