Por Luis Baez
SANTIAGO.- Continúan las acciones de las autoridades, en contra de los ciudadanos que participan de fiestas clandestinas, en esta ocasión un grupo de 35 personas en su mayoría jóvenes fueron apresadas, disfrutando de una actividad en medio del toque de queda.
El desmantelamiento de la fiesta clandestinada fue encabezado por el procurador fiscal de este Distrito Judicial y director de la Policía Nacional en Santiago, quienes advierten que continuarán los operativos y así hacer cumplir las disposiciones sanitarias frente al toque de queda.
Sobre el particular el general Eduardo Alberto Then, informó que todo aquel que sea sorprendido violando las disposiciones sanitarias en horario nocturno será sometido a la justicia.
Todos los apresados, deberán pagar una multa de 10 mil pesos, para quedar libres, mientras que al propietario del negocio se le aplican 10 salarios mínimos equivalente a 100 mil pesos, según José Francisco Núñez, procurador fiscal de Santiago.
La fiesta clandestina se estaba desarrollando en una villa de alquiler con piscina, ubicada en la carretera Luperón del sector Gurabo en Santiago.