Por Sandy Cuevas
SANTO DOMINGO.- Tras la muerte de la arquitecta Leslie Rosario y otros incidentes que involucran a agentes de la Policía Nacional, la reforma policial ha tenido que ser acelerada por la desconfianza de la población en la institución del orden.
Autoridades internacionales y nacionales, al culminar un seminario realizado durante tres días, se mostraron optimistas de los avances del proyecto y dijeron que no se puede esperar más para aplicar los cambios que se requieren.
Reconociendo que muchos de los agentes de la Policía Nacional no tienen ni el más mínimo conocimiento de cuáles son sus funciones dentro de la institución, la vicepresidenta Raquel Peña dijo que la reforma es prioridad nacional.
En tanto el ministro de Interior y Policía, Jesús Vásquez, pidió a la clase política, empresarial y a la sociedad en general involucrarse en el proceso, asegurando que la policía no es solo del gobierno.
Para José Vila del Castillo, represéntate de las Naciones Unidas, la reforma policial no es cuestión de aumento de salario para los agentes, insistió que es necesario que todos los actores del país sean parte de la transformación.
Ante la crítica realizada por el expresidente Hipólito Mejía, de que no se debe dejar sin su arma de reglamento a los agentes cuando estén fuera de servicio, el presidente de los Derechos Humanos y el jurista Cándido Simón catalogaron fuera de lugar, la posición del exmandatario.
El seminario contó con el apoyo de Los Estados Unidos, España, Colombia, Panamá entre otros.
El Ministro de Interior y Policía indicó que este próximo lunes la institución habilitará una oficina para que la población en general presente sus sugerencias, además dijo que realizarán 4 foros para escuchar el sentir de los ciudadanos respecto al tema.