Nunca se ha separado de la música el negocio más peligroso y próspero de los últimos años. Como el camaleón trata de confundirse de niño bueno en momentos difíciles. Desde que nosotros vimos la fuerza desplegada en ánimo de arropar a los jóvenes barriales cual padrino sin cultura comenzamos a publicar y a dar declaraciones sobre ello. Ustedes saben muy bien que lo hemos dicho a pesar del riesgo que corre el que plantea estas cosas.
Algunos “artistas” beneficiarios de ellos fueron los primeros en tratar de ridiculizarnos y tal cual foro público de épocas ya superadas colocaban en su voces todos los epítetos inimaginables de nuestra persona. No solamente no nos bajó la moral, sino que nos animó al través de medio como este a hacer más viva nuestra denuncia. En muchas oportunidades hemos denunciado que alguno disqueros, empresarios y artistas poseen más de una identidad. Viajan a países con pasaportes distintos, claro tratando de esconder su realidad. Saben que aquí el comentario que se publica no recibe censura de nuestro espacio, usted puede decir lo que quiera y aquí queda escrito. Se alimentarme de los buenos y malos comentarios, necesito saberlo con toda libertad.
Escribimos hace un tiempo que: “lo que alguna vez fue un honesto oficio en lo que según ellos (y solo en su mente) es el origen de la fortuna que tiran para arriba. No es casualidad que los proyectos que más suenan, a pesar de su mala calidad, tengan estrechas relaciones con los llamados jodedores, quienes lo han jodido todo. No pensé seguir haciendo denuncias al respecto, pues las soluciones no pasan de una mera promesa cuando explota algún escándalo. Yo al igual que el pueblo estoy cansado de lo mismo: se comete, se paga, se enfría, se olvida y vuelve la mula al trigo. Que puedo decir yo que no sé sepa. Se me ha secado la garganta diciendo lo mismo. Las muestras están a la orden del día y el narco está dejando este pueblo sin territorio y a este territorio sin pueblo. Decíamos ayer, que por inercia, a nosotros los jornaleros del arte el narco nos ha dejado dos opciones: o te unes a ellos o te olvidas de la música. Y para colmo ahora nos dicen que nuestra economía tiene una gran dosis de narco dólares y de lavado.