SANTO DOMINGO.- La variación de prisión preventiva por arresto domiciliario para Alexis Medina y otros tres implicados en el supuesto desvío millonario de fondos públicos develado mediante la Operación Anti-Pulpo evidenció la lentitud de los procesos y las carencias del sistema judicial, de acuerdo con diversos sectores, mientras el Ministerio Público insiste que presentará las pruebas para llegar a un juicio de fondo.
Aunque la decisión de séptimo juzgado de la instrucción fue recibida con desagrado por el Ministerio Público y algunos miembros de la sociedad civil, recuerdan que el envío a arresto domiciliario no significa el fin del proceso.
El propio Wilson Camacho, director de la PEPCA, lamentó la decisión del juez Deiby Timoteo Peguero, y desatacó que estas investigaciones “son megacomplejos y por tanto el Poder Judicial debería asumirlos en esta dimensión.
Para el presidente del Colegio de Abogados, la decisión del juez Peguero está dentro del marco del artículo 242 de, Código procesal.
Aunque reconoce los esfuerzos del Ministerio Público, el abogado de Alexis Medina considera que ha habido una abuso en cuanto al uso de prisión preventiva, manteniendo pruebas ocultas.
Luego de casi 21 meses en prisión preventiva, Alexis Medina, hermano del ex presidente Danilo Medina, Fernando Rosa, José Dolores Santana y Wacal Vernavel Méndez cumplirán a arresto domiciliario luego del pago de fianza millonaria y deberán usar grilletes electrónico.