Querer reducir una investigación de cuatro meses, llevada a cabo por un equipo de 50 periodistas de 10 países, incluyendo El Informe que produce esta servidora y encabezada por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación, a una simple tabla de Excel es muy conveniente para unos cuantos pero no para la inmensa mayoría de los dominicanos que espera respuestas contundentes en el Escándalo de Odebrecht, el caso de corrupción más grande en la historia del país.
La tabla de Excel, como le dice el Procurador General, con más de 600 pagos para obras de diversos países de América Latina, con montos, empresas y nombres en clave, fue solo el punto de lanza para iniciar la ardua búsqueda de identificar a los dueños de las empresas. Aquí por ejemplo, sólo conocíamos de Lashan y Conamsa, pero no de las otras empresas que recibieron pagos de compañías que la constructora dijo fueron creadas para el esquema de sobornos.
Encontrar los rostros que se esconden detrás de estas OFFSHORE no es tarea fácil. Por ejemplo, si no hubiera sido porque Andy Dauhajre compró una propiedad en New York y otra en Miami con Baker Street Financial, tal vez nunca hubiésemos sabido de los pagos que ascienden a 3.3 millones de dólares.
Hemos ido descubriendo a los dueños de las otras offshore poco a poco y con mucho sacrificio, inclusive con la ayuda de abogados que se dedican a estas faenas.
Las horas que hemos pasado buscando en la base de datos compuesta de unos 13 documentos, rastreando pagos en estados bancarios, sumando y restando, calculando qué obras estaban involucradas, y a qué sobrenombres están asociadas, en qué época ocurrieron, y qué aprobaciones se daban en el congreso para la fecha. Esto, además de los miles de correos electrónicos en los que también encontramos pagos para obras, con sus respectivos apodos.
En fin, señor Procurador, con todo el respeto que usted se merece, en vez de restarle importancia a un trabajo que ha abierto la puerta a que se profundicen las investigaciones, usted debe preocuparse por hacer las indagatorias necesarias, preguntando mínimamente a los que inicialmente admitieron haber recibido pagos de 100 mil o 500 mil dólares por asesorías, pagos que ahora resultan con sumas de uno o dos millones de dólares en desembolsos, como es el caso del Grupo Sophus Lanx de José Manuel Guzmán Ibarra y Value Added Finance y Optimum Advisors Corp, ambas de José Gregorio Salcedo Llibre.
El país ha sido paciente, ha observado, ha dado seguimiento a lo que ha ocurrido en la Suprema Corte de Justicia con respecto al caso de Odebrecht, pero también está cansado de lo que popularmente se conoce como el mareo, porque las palabras bonitas ya no son suficientes, la pelota ha rebotado y está en su cancha.